El académico de la U. de Santiago y cientista político, Marcelo Mella, consideró que el apoyo dado por el Partido Comunista a la candidatura presidencial de Michelle Bachelet será determinante durante las primarias y la elección presidencial y, además, descartó que votos de centro vayan a “moverse hacia la derecha.
“Para la Concertación es decisivo contar con el apoyo del Partido Comunista, en primer lugar porque las primarias del 30 de junio se van a transformar de todas formas en un termómetro de la capacidad de movilización electoral de los candidatos en un contexto de voto voluntario”, señaló el experto.
“En segundo lugar -agregó Mella – porque tal como están dadas las cosas, en un escenario de cuatro, cinco o seis candidatos, es muy difícil pensar que la primera vuelta presidencial está garantizada para la Concertación”.
El experto sostuvo que, “el apoyo del PC despaja cierto umbral de incertidumbre que en este momento existe en la Concertación”.
En cuanto a los dichos de Carlos Larraín (RN) respecto a buscar los votos de centro, el analista de la U. de Santiago descartó que parte del electorado DC vaya a desplazarse hacia la Alianza.
“Todavía en Chile existe la división entre partidarios y detractores de Pinochet. Esto va a evitar que votos DC se vayan a la derecha”, aseguró Mella.
“Esta división – añadió el analista – tiene relevancia, entendiendo que la clase política actual es bastante parecida a la que existía en el 88 y 89. Es la misma generación que permanece en los puestos de poder, y mientras no exista una generación de recambio, esta fragmentación va a seguir estando presente, de manera que la expectativa de movilizar electorado o militantes de la DC no tiene lugar”.
“Tradición republicana del PC”
Para el académico de la U. de Santiago las críticas a la Concertación y a la candidatura de Michelle Bachelet por una supuesta “ambivalencia” al recibir apoyo del PC, “no tienen gran efecto”.
“El electorado entiende que la historia del Partido Comunista de Chile está vinculada a la participación en el parlamento y en los procesos republicanos del país”, señaló Mella.
“Si el Partido Comunista adoptó una postura insurreccional, fue estrictamente en el contexto de la dictadura. En la conciencia histórica de los chilenos está presente su trayectoria republicana”, concluyó el académico.
Por Alex Araya L.
Santiago de Chile, 28 de mayo 2013
Crónica Digital
Mi único interés, en comentar este artículo, es contribuir positivamente a la discusión (en el correcto sentido del término)de la situación política y el accionar de la izquierda en ella.
Creo que sería necesario tener presente que la pre-candidatura de M. Bachelet nunca ha sido de la Concertación.
Aquí hay un aspecto bien importante que habría que delucidar con prontitud. En mi opinión, la ex-Concertación dejó de existir cuando asumió Piñera en 2010. Desde ahí, jamás he leído documento o declaración pública elaborado por dicha coalición como tal. Más aún, no ha habido ningún dirigente político que se haya desempeñado como representante del bloque. Cada dirigente ha actuado expresando posiciones partidarias exclusivamente.
Encuentro que es un poco confuso seguir haciendo referencia a una coalición que ya no existe (Así sea para bien o para mal). (Correspondería hablar en tiempo presente de la UP?).
Prueba de la no vigencia del término Concdertación es precisamente el respaldo a Bachelet del PS, PPD,y MAS antes del apoyo del PC e IC. Incluso, despues de la Primaria de Junio, si ella ganara, sería la candidata oficial de la nueva coalición, denomindada Nueva Mayoría, constituida por siete partidos y, (Dios me oiga y el diablo se haga el imbécil) por organismos sociales posiblemente.
Como vemos, por angas o por mangas, la ex-Concertación sería un ente de la historia de Chile.
Estoy de acuerdo con el señor Mella en que la derecha no va a permanecer resignada a una posible derrota y recurrirá a todo, legal e ilegal, para destruir la postulación de Bachelet. La treta más vulgar será la de quitarle posibles votantes a través de la campaña del terror anticomunista.
Como dice el profesor Mella, el antagonismo político creado por la dictadura, todavía vigente es un factor que neutralizaría los afanes derechistas.
Hay otro hecho histórico que también podría ser tomado como referencia para la situación presente y los afanes derechistas de destruir a Bachelet. Es la campaña presidencial de 1964.
Una elección parlamentaria complementaria, a pocos meses de la presidencial, indicó que la candidatura derechista estaba condenada a la derrota y Allende se perfilaba con la primera opción. El otro candididato era Frei Montalva.
La derecha no retiró a su candidato, sino que lo mantuvo asignándole el rol de hocicón, (perdón, de vocero) de la más grocera y millonaria propaganda anticomunista de esa época. La gente, quisieran o no, escuchaban sus diatribas y al final los votos fueron para Frei por puro miedo a que si ganaba Allende los comunistas iban a comerse a las guaguas. Frei ganó lejos y una vez más la voluntad popular había sido manipulada por la derecha.
Ojalá que mis aprehensiones estén demás y esta vez todos los chilenos hermanados en el noble proyecto de la Nueva Mayoría lleven a Michelle Bachelet por el camino de victoria.