Luego que el presidente Sebastián Piñera pidiera perdón al país por el escandaloso informe sobre el Censo y las deficiencias mostradas por el Instituto Nacional de Estadísticas, el diputado Ramón Farías valoró el gesto “porque es lo mínimo que se puede hacer ante un hecho tan vergonzoso como este”.
Sin embargo, el legislador afirmó que “no es suficiente con sólo esa señal, sino que se requiere que los responsables políticos y administrativos respondan y se tomen cuando antes las medidas para solucionarlo, porque fueron 30 mil millones de pesos tirados a la basura, sumado a los perjuicios que se provocarán al no poder elaborar políticas públicas de acuerdo a esas cifras”.
“Que el presidente de Chile haya tenido que salir a pedir perdón es la comprobación que todo lo que se pudo hacer mal, se hizo mal. Creo que aún no se sopesan los verdaderos efectos negativos de este error y se requieren medidas concretas y rápidas. En este sentido, con la misma voluntad con que se pide perdón, se deben establecer responsabilidades”.
El parlamentario, que forma parte de la Comisión Investigadora, hizo un llamado a las autoridades a que “no traten de empatar ni de responsabilizar a las administraciones anteriores, sino que se tomen las acciones para enmendar este fracaso. Ya que no tuvimos el mejor censo de la historia, por lo menos que se tome la decisión de hacer un nuevo censo abreviado, como propone la instancia, para por lo menos contar con algunas cifras que nos den confianza”.
Santiago de Chile, 9 de agosto 2013
Crónica Digital