El senador Guido Girardi, presidente de la Comisión de Salud de la Cámara Alta, respaldó las declaraciones de Janette Vega, directora de Fonasa, quien propuso que el 7% de cotización obligatoria de salud de todos los chilenos vaya a un fondo único para que los recursos se distribuyan de manera solidaria, permitiendo así que los afiliados sanos subsidien a los enfermos.
“Me parece que es un debate fundamental que debe realizar de la sociedad chilena porque el modelo de Salud, al igual que en el sistema de pensiones están hecho para la privatización. Todos los incentivos están destinados a un traspaso progresivo de las prestaciones públicas al sector privado y sucede es lo mismo que en educación municipal que se ha ido privatizando y desplazando hacia la particular subvencionada”, señaló Girardi
El senador señaló que tras la propuesta de la directora de Fonasa hay “una lógica que apunta a transformar la salud en un bien público como ha sido y es en la mayoría de las sociedades del planeta en particular en los países de la OCEDE donde se considera un derecho garantizado y en la mayoría ni siquiera existen los sistema de salud privado”.
El parlamentario agregó que “se debe entender la salud como un derecho, por lo cual el actual gobierno de la presidenta Michelle Bachelet ha tomado acciones para que esta iniciativa se lleve a cabo, creando la comisión asesora presidencial para reformar el sistema de salud privado”.
“La Organización Mundial de Salud (OMS), recomienda que el sistema se financie de acuerdo a las capacidades de contribución de cada persona, primado el valor de la solidaridad. Entendiéndose esto último como el concepto en el que sanos financian a los enfermos, los ricos financian a los más pobres y los más jóvenes a los ancianos. Bajo este principio la Comisión Asesora, debería proponer cual será el futuro del sistema ISAPRE y que rol van cumplir, pues en estos momentos nuestro país cuenta con un sistema excluyente y se debe apostar a crear un real fondo de seguridad social, tal y como los países desarrollados”.
“Debemos hacer entender a la sociedad que salud es un derecho y este no debe ser transable como un bien de consumo. Tal y como está instalada la discusión en educación, esta ahora debe centrarse en nuestro sistema de salud”.
“Como presidente de la Comisión de Salud del Senado me debo sumar al apoyo del planteamiento realizado por la Directora de FONASA y en el congreso tenemos las puertas abiertas a que esta discusión se instale dentro de nuestra agenda legislativa. Escucharemos a todos los actores involucrados en el proceso, sin embargo considero que deben primar los lineamientos de salud como derecho universal y un sistema solidario”.
Debemos hacer los cambios necesarios en nuestra actual legislación para que todos los chilenos tengan acceso oportuno a una salud de calidad. Esto sólo es posible contando con el aporte de todos los chilenos, ya que actualmente las personas con mayores ingresos hacen su aporte a un sistema que discrimina por riesgo de salud y basado en la generación de ganancias. Esto por su puesto se traduce en resultados sanitarios muy favorables, sin embargo más de 11 millones de chilenos deben ser atendidos en un sistema en crisis. A pesar que todos los profesionales hacen un gran esfuerzo para mantener a la población en un buen estado de salud, se requieren más recursos tanto para ampliar cobertura de tratamientos, mejorar la infraestructuras de nuestros centros de salud, aumentar las horas de médicos en atención primaria y de especialistas con condiciones dignas de trabajo que se traduzca tanto para profesionales como técnicos.
Por este motivo es muy necesario generar las instancias para poder discutir y dialogar, ya que se requiere de cambios profundos en el sistema, pues tampoco se pueden excluir al 20% de la población beneficiaria del sistema privado, por lo tanto hay que estudiar cual es rol que estos prestadores cumplirán, con la idea que sean más bien seguros complementarios a un sistema único de salud que garantice el acceso universal.
Crónica Digital, 25 de julio 2014
