El presidente de la Orden, doctor Jaime Acuña, hizo un llamado “al Estado a asumir su responsabilidad en que haya atención odontológica para todos los chilenos y chilenas”.
Acuña afirmó que “desde el año 2007, hemos venido planteando a las autoridades que el intrusismo, la existencia de falsos dentistas, es uno de los problemas más graves para nuestros pacientes y para la odontología. Como consecuencia de este trabajo, un grupo de diputados presentó un proyecto de ley que pretende endurecer las penas en contra de estos falsos profesionales de la Odontología. Sin embargo, hoy el proyecto duerme y hemos pedido que se reponga”.
El presidente del Colegio de Dentistas afirmó que “actualmente, la tipificación del delito de intrusismo hace que, en la práctica, los falsos dentistas no vayan a la cárcel. Esto es aberrante porque, como se comprobó en el último caso, las penas remitidas les permiten cambiarse de barrio y seguir delinquiendo”.
“Para corregir este problema –afirmó Acuña- es fundamental que el Estado entienda que los falsos dentistas se aprovechan de una necesidad no resuelta: el acceso. Por lo general, estas personas llegan donde el derecho a la salud bucal no está garantizado. Y es ahí donde urge, como lo decimos cada día, tener políticas mucho más intensivas que las actuales”.
Acuña afirmó que “en segundo lugar, usar la herramienta penal: que quienes trabajen como dentistas sin tener su título universitario, tengan penas de presidio entre los 3 años y 1 día y los 5 años, sin derecho a libertad, como lo plantea el proyecto de ley que actualmente está en el Congreso”.
El presidente de los dentistas planteó que “la deuda del país con la salud bucal es tan grande que no podemos seguir esperando. Hoy solo un 30 por ciento de la población tiene acceso pleno a la atención. No es digno de un país que pretende ser más justo y más desarrollado”.
Santiago de Chile, 28 de julio 2014
Crónica Digital