Ungido de glorias pasadas en Juegos Olímpicos y la clasificación mundial, el tenis chileno deposita hoy la mirada en el futuro con el favor de grandes estrellas de antaño.
La idea de dotar a Chile de mayor rango en la arena internacional volvió a cobrar fuerza con el empuje de Nicolás Massú, Marcelo Ríos y Fernando González, tres nombres muy recordados en los courts más prestigiosos del orbe.
Massú, doble medallista de oro olímpico en Atenas 2004, reiteró su interés en aportar experiencias al llamado deporte blanco, con acento en el trabajo con los jóvenes talentos del país sudamericano.
A propósito del décimo aniversario del encumbramiento de Massú, junto a González en dobles tras batir a los alemanes Nicolás Kiefer y Rainer Schuettler, y luego en individuales, el jugador admitió que la tarea no será nada fácil.
«Quiero ayudar para lograr jugadores de primer nivel. Hay que tener calma, no se hace de un día para otro… El tenis es un deporte difícil», declaró a la emisora Radio Cooperativa.
Pero antes, Massú, González y el «chino» Ríos, de forma independiente ya dieron los primeros pasos para dar un impulso a una de las disciplinas que mayores alegrías dio a la nación transandina.
Massú es actualmente el capitán del elenco chileno para la Copa Davis, y al lado de González, Ríos y otras personalidades de este deporte, encabezó un llamado al mismísimo Palacio presidencial de La Moneda en busca de apoyos.
El «chino» Ríos, quien llegó a ser el número uno del ranking mundial en 1998 destronando nada menos que al estadounidense Pete Sampras durante seis semanas, se sumó también a José Hinzpeter, presidente de la Federación Nacional de Tenis.
Elegido el Mejor Deportista de Chile del siglo XX, Ríos, Massú y Hinzpeter, se reunieron en la sede del Congreso Nacional con la ministra de Deportes, Natalia Riffo, y varios diputados.
La idea es aplicar en la nación transandina un formato similar al famoso torneo Roland Garros de París, con una proyección de cuatro años a partir del segundo semestre de 2014.
Los entusiastas ex jugadores, con el respaldo de parlamentarios y otras figuras públicas chilenas, tienen en perspectiva mejorar las infraestructuras, el alto rendimiento y el desarrollo con una inversión de 825 mil dólares anuales.
Remozamiento total de las instalaciones, construcción de un centro de entrenamiento para las selecciones nacionales y jugadores del alto rendimiento, se inscribe en el plan que comprende la captación de talentos y masificación del deporte.
Ríos y Massú ofrecen sus servicios como asesores y también en calidad de técnicos, confiados en sumar al programa a Fernando González, medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 al caer en la final frente al español Rafael Nadal.
«Este proyecto es la única manera de darle un impulso al tenis. De lo contrario, vamos a seguir marcando el paso como el resto del deporte chileno», sentenció el titular de la federación Hinzpeter.
Por Fausto Triana
Santiago de Chile, 22 de agosto 2014
Crónica Digital / PL