) Danzas folclóricas tradicionales, desde el Rapa Nui hasta la Cueca, pingüinos y osos de la Antártica, los Andes y el desierto de Atacama: Chile muestra sus excelencias en la Feria de Turismo.
Componente esencial también, las rutas del vino del cuarto exportador mundial de la bebida en el enorme Centro Cultural Estación Mapocho de esta capital, donde se celebra el avance de la industria sin chimeneas en el país austral.
Lo que suponía competencia ahora se ensambla armoniosamente, con un convenio alcanzado entre Argentina y Chile dentro de la cita que concluye hoy. Desde Ushuaia hasta Puerto Williams para aprovechar los espectaculares parajes de la Tierra del Fuego.
«Tenemos un potencial en ascenso. Los argentinos han explotado los sitios que colindan con la región de Magallanes y la Antártica chilena, pero nosotros tenemos más zonas vírgenes», dijo un directivo del turismo de esa zona.
Sergio Tapia, presidente de la Asociación Magallánica de Empresas del Turismo, explicó a Prensa Latina que las bondades naturales permiten acoger a más de 600 mil viajeros por año, una cifra imponente a nivel nacional.
Los traslados al Círculo Polar Antártico o al emporio de los pingüinos en Isla Magdalena, donde se puede caminar con cuidado y bajo la prohibición de fumar, entre 170 mil parejas de estas aves marinas, resaltan en el área, apuntó Tapia.
Pero tampoco se puede pasar por alto a la Bahía Lomas, a tres horas de Punta Arenas, la capital de la región, un humedal que asoma al Océano Atlántico con una extraordinaria reserva de aves y albergue temporal de la ballena de aleta larga y la orca negra.
Más hacia el centro de la larga y estrecha geografía chilena, la región del Maule es una de las más emblemáticas en torno a la ruta del vino con más de 20 grandes viñedos, entre ellos los prestigiosos Concha y Toro, San Pedro y Miguel Torres.
Carolina Reyes, directora regional de Turismo del Maule, detalló que los atractivos se basan en recorridos por las viñas en el polo denominado Curicó Valle y Cordillera; excelencias de la gastronomía local, y siete bolsones de caídas de agua.
Volcanes, caudalosos ríos, artesanía sui-géneris de crin de caballo, y una variedad muy gustada de platos basados en productos del mar, permiten al Maule recibir un promedio de 170 mil turistas anuales.
Para completar una muestra de la industria sin humo del país austral, convertida en el cuarto pilar de la economía nacional, una bella modelo exhibía en su vestido la cifra de 55 kilómetros para señalar la distancia de Santiago con Valparaíso.
Con mucho entusiasmo, Gloria Mundaca, encargada de Turismo de la municipalidad de Los Andes en la región de Valparaíso, relacionó a Prensa Latina los numerosos perfiles de interés que se encuentran a menos de una hora de la capital chilena.
«La cerveza artesanal Abbatia que organiza excursiones del Valle de Aconcagua; los vinos Errázuriz, Sánchez de Loria y San Esteban; campamentos de invierno, reservas de la biosfera; y los destinos de la Isla de Pascua y Juan Fernández», apuntó.
La especialista mencionó asimismo al hecho de que la región de Valparaíso cuenta con más del 70 por ciento de los Petroglifos (grabados en rocas) de Chile, que datan de por lo menos hace mil 500 años.
México, Argentina, Uruguay, Perú, Paragua, Brasil y el Caribe, igualmente desplegaron sus atracciones en los stands de la feria VYVA 2014 (Viajes y Vacaciones).
Durante la Rueda de Negocios Internacionales, los tour operadores comercializaron ofertas de Alemania, España, Inglaterra, Australia, Brasil, Estados Unidos, México, Colombia, Argentina y Perú.
Por Fausto Triana
Santiago de Chile, 17 de noviembre 2014
Crónica Digital / PL
