El presidente de la Izquierda Ciudadana, diputado Sergio Aguiló (IC), valoró la aprobación en la Cámara del proyecto de ley que tipifica el delito de tortura en Chile, pero lamentó que la derecha no haya pedido disculpas por apoyar este flagelo en dictadura
“Por primera vez en Chile después de tantos años se tipifica el delito de tortura, se define quienes practican este tormento y se establecen sanciones drásticas respecto de quienes puedan cometerlo”, precisó Aguiló.
“Este es un flagelo –agregó- que por desgracia ocurre en todos los países del mundo cuando regímenes de excepción o dictaduras que se instalan contra la voluntad del soberano y en América Latina y en particular en Chile causó dramáticas consecuencias”.
Sostuvo que “hay mucha gente que vivió la prisión y la tortura sistemáticamente en nuestro país durante la dictadura de Pinochet y; hasta ahora no contábamos con instrumentos legales para prevenir y sancionar cuando se cometen este tipo de delitos”.
Destacó que la iniciativa fue propuesta por la bancada PC-IC “para ponernos al día con las principales definiciones sobre esta materia en relación a los tratados internacionales de Naciones Unidas y CIDH. Es, sin duda, un avance importante para definir las conductas del Estado en esta materia tan importante”.
“Sin perjuicio, que se aprobó unánimemente hubiese esperado una actitud de reconocimiento de los horrores que se cometieron en la dictadura por parte de la derecha que hasta hoy sigue guardando estricto silencio de cómo se aplicó sistemáticamente la tortura en Chile. La derecha nunca ha pedido disculpas por el apoyo político que le dio a esos instrumentos que son unánimemente rechazados en el mundo entero”.
Según la iniciativa «se entenderá por tortura todo acto por el cual se inflija intencionadamente a una persona dolores o sufrimientos graves, ya sean físicos, sexuales o psíquicos, con el fin de obtener de ella o de un tercero información, declaración o una confesión, de castigarla por un acto que haya cometido, o se le impute haber cometido o de intimidar o coaccionar a esa persona, o en razón de una discriminación fundada en la raza o etnia, nacionalidad, ideología u opinión política, religión o creencia, u orientación sexual».
Se establece, específicamente, que el que infligiere a otra persona un trato degradante, menoscabando gravemente su dignidad, será castigado con la pena de reclusión menor en su grado mínimo (61 días a 5 años).
Asimismo, se establece que se aumentará la pena en un grado al que cometiere la conducta recién descrita, en contra de una persona menor de edad o en situación de vulnerabilidad por discapacidad, enfermedad o vejez, o quien la tenga bajo su cargo, cuidado o responsabilidad.
La propuesta introduce un cuerpo especial en el artículo 161 del Código Penal enfocado solo al tema de la tortura. En dicho apartado se indica que el empleado público o el particular que, a instigación suya, o con su consentimiento o aquiescencia, aplique tortura a una persona, será penado con presidio mayor en su grado mínimo (desde 5 años y un día a 10 años). El encubridor de tal conducta será castigado con la pena de presidio menor en su grado máximo (desde tres años y un día a 5 años).
Autores del proyecto son Sergio Aguiló (IC); Karol Cariola (PC); Lautaro Carmona (PC); Hugo Gutiérrez (PC); Tucapel Jiménez (PPD); Felipe Letelier (PPD); Daniel Núñez (PC); Guillermo Teillier (PC) Camila Vallejo (PC) y Patricio Vallespín (DC)
Santiago de Chile, 15 de diciembre 2015
Crónica Digital
Felicitaciones Honorables Diputad@s PC E IC por la iniciativa!!! Esto es avanzar en DDHH!!!