El movimiento libanés Hizbulah condenó hoy la decapitación de un niño palestino por grupos terroristas en Siria, donde por otro lado el Frente Al-Nusra mostró evidencias de uno de sus combatientes capturado recientemente en el Qalamoun.
«El asesinato del niño palestino completó la guerra sin cuartel contra el oprimido pueblo palestino, cuya juventud, infancia, mujeres y ancianos están siendo atacados dondequiera», expresó la agrupación de Resistencia chiita en un comunicado divulgado en Beirut.
Según la información, el menor de 12 años de edad fue decapitado por miembros del batallón Nour Al-Din al-Zinki en la norteña ciudad siria de Alepo, supuestamente por alistarse para combatir junto al ejército leal al gobierno de Damasco.
Hizbulah señaló que quienes mataron al niño «tienen el respaldo de Arabia Saudita y Estados Unidos», y tales «crímenes son un indicador claro de que grupos etiquetados por Occidente como parte de la oposición siria moderada no se diferencian del DAESH», nombre árabe del Estado Islámico.
Denunció, asimismo, que las agresiones a los palestinos «iniciaron con el enemigo sionista (Israel) en Palestina, y están continuando por los agentes y socios de esta entidad de terrorismo en cualquier lugar del mundo, especialmente en Siria».
Según el gobierno del presidente Bashar Al-Assad, el Batallón Nour al-Din al-Zinki tiene sus bases principales en la provincia de Alepo y está entre los grupos receptores de armas de fabricación estadounidense, incluidos misiles antitanque.
Por otro lado, medios informativos en esta capital comentaron el video difundido ayer por el Frente Al-Nusra, la filial de Al-Qaeda en Siria, en el que se ve a un combatiente de Hizbulah detenido recientemente junto a otros aliados al ejército sirio.
Las imágenes muestran a cuatro prisioneros, incluido el integrante de la agrupación chiita, de los 14 apresados por Al-Nusra en el puesto de control de Al-Safa, en las afueras de Rankous, en la región occidental del Qalamoun.
En el video, según fuentes opositoras, los prisioneros piden al ejército de Damasco y sus aliados no ingresar a los poblados de Hureira e Ifra, en Wadi Barada, para evitar la muerte de los rehenes.
Beirut, 21 de julio 2016
Crónica Digital / PL
