Expresó, además, el propósito de comenzar las negociaciones con Reino Unido cuanto antes, de ser posible ‘al día siguiente’ de las elecciones generales en ese país, previstas para el 8 de junio.
Barnier enfatizó en una intervención ante el Parlamento Europeo que antes de su salida de la Unión, Londres debe asumir el pago de las obligaciones presupuestarias que suscribió como miembro de esa entidad, que según estimados de algunos analistas asciende a unos 100 mil millones de euros.
El 3 de mayo último el negociador expresó en conferencia de prensa que si Reino Unido no respeta esas cuentas e interrumpe los proyectos y programas de la UE que se comprometió a financiar, la situación ‘podría explotar’, y se refirió a los problemas jurídicos e incluso políticos que podrían derivarse de tal posición.
El funcionario europeo recalcó hoy ante los parlamentarios que la desconexión británica debe desarrollarse de forma progresiva y en la primera fase se deben abordar, además de los compromisos financieros, los derechos de los ciudadanos comunitarios que viven en Reino Unido y los de ese país, residentes en naciones de la UE.
Barnier añadió que la tercera prioridad en la etapa inicial de esas negociaciones es delimitar el futuro estatus de la frontera entre Irlanda, miembro del bloque regional, e Irlanda del Norte, que integra Reino Unido, tras salir ese país del bloque regional.
Londres, 17 de mayo 2017
