Un impacto colosal con un asteroide en la historia temprana de Marte pudo haber arrancado un pedazo del hemisferio norte y depositar elementos metálicos en el interior del planeta, divulga la Universidad estadounidense de Colorado.
El accidente también creó un anillo de escombros rocosos alrededor de Marte que se habría agrupado más tarde para formar sus lunas, Phobos y Deimos.
Es la explicación que Stephen Mojzsis, profesor de la Universidad de Colorado, esboza como una causa probable del misterio que supone la existencia en Marte de hemisferios geológicamente distintos.
El planeta rojo presenta tierras bajas lisas en el norte y terreno elevado con cráteres en el sur, con dos pequeñas lunas oblongas de forma extraña y una composición que las diferencia de la de la Tierra.
Hemos demostrado en este trabajo que, a partir de la dinámica y de la geoquímica, podríamos explicar estas tres características únicas de Marte. Esta solución es elegante, en el sentido de que resuelve tres problemas interesantes y sobresalientes sobre cómo llegó a ser Marte, señaló Mojzsis.
Washington, 20 julio 2017
Crónica Digital /PL
Jue Jul 20 , 2017
Los Niños Primero era una frase que George W. Bush repetía en el ámbito doméstico. Sin embargo no vaciló en invadir Irak en 2003 siendo los niños las primeras víctimas, las de siempre, en fin de cuentas, y causando un caos del cual la región del oriente medio no se libra hasta hoy. Hay una demagogia perniciosa en eso de Los Niños Primero enunciado por políticos y jefes de estado en particular. En este sentido con la Convención de los Derechos del Niño se produce un contrasentido: la excesiva politización obstruye más que facilita a proteger el interés del niño. La cifra que expone el Hogar de Cristo en Chile, de que se necesitan casi 2 millones de pesos al mes para atender óptimamente a un niño en el sistema del SENAME, bordea otro tipo de demagogia: aquella de que con el gasto adecuado supuestamente se soluciona el problema. Esa demagogia del político y del trabajador social, se tropieza con el panorama técnico y cultural que debe enfrentar esa Convención, instrumento genial en principio, aunque con un recorrido lleno de dificultades. Nadie esperaba que fuera a ser fácil. El nacimiento de la crisis que se destapa en el Servicio Nacional de Menores (SENAME) en Chile, proviene de la década de 1990. Tiene una arista internacional vinculada al modelo económico instaurado en la década de 1980, que propende a tensionar en forma permanente el gasto social fiscal por el mecanismo del ajuste que impacta regresivamente al gasto (o inversión) en infancia y en niñez. En 1992, MIDEPLAN, hoy Ministerio de Desarrollo Social, informaba que el gasto público en niños hasta los 18 años, representaba el 14 % del total del gasto público; una cifra alta que no se mantuvo. Los datos duros del gasto público en este grupo etario, mientras se multiplican los programas de protección social, cada vez más son más difíciles de obtener. En todo caso no han superado el 2.5 y 3% del PIB desde décadas, lo que ubica a Chile en el cuadro medio. (BID.2016). La crisis del SENAME y sus elementos centrales, en el fondo es una falla no corregida en las políticas sociales. Desde esta perspectiva, la falla Menor proviene del SENAME mismo y su gestión, que no es diferente a la de muchos países de escasos recursos. En el intenso y desvirtuado debate político, la búsqueda de culpables individuales sobrepasa el diagnóstico de las causas sistémicas. Es una falla de estado advertida en un trabajo – entre otros- de UNICEF-Santiago para el SENAME de agosto 1995: Informe de conocimiento de los Centros de Tránsito y Diagnóstico Ambulatorios(CTDS) de Osorno, Valdivia, Los Ángeles, Chillán, Copiapó, La Serena y Antofagasta. (UNICEF-Santiago. 1995). El documento señala la fragilidad conceptual en las políticas sociales producto de la constante presión del sector económico para limitar el gasto en infancia. En la revisión, se constató: Primero, en Chile había un déficit conceptual y práctico para alcanzar en tiempo prudente una política pública integral enfocada en la infancia. Segundo, el aspecto ético. En la […]