La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) llamó hoy a fortalecer la concertación regional en defensa de las mujeres como parte de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible.
A 40 años de la primera conferencia sobre las mujeres en el área, la agencia de Naciones Unidas pasó revista a los avances y retrocesos en materia de género, en una reunión de dos días que sesionó en el habanero Hotel Nacional.
Según destacó la uruguaya Mariela Mazzoti, la democracia de género paritaria no puede construirse en un país aislado; es necesario el proceso de aprendizaje conjunto, y una vinculación muy fuerte con la sociedad organizada.
El aprendizaje colectivo debe comprender a los estados y a las organizaciones civiles comprometidas con la igualdad de género, recalcó la presidenta de la Mesa Directiva de la Conferencia Regional sobre la Mujer.
A juicio de la secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena, en esta hora compleja del mundo, «en la que el multilateralismo está recibiendo los embates de grandes adversarios», es preciso decir que «tiene sentido construir espacios colectivos para abordar juntos los desafíos».
Reunidos, «avanzamos más rápido; compartir nuestros éxitos y retrocesos nos ayudará a sortear la ruta que tenemos que seguir», dijo la funcionaria de Naciones Unidas, al clausurar el foro.
A lo largo de cuatro décadas, la Conferencia Regional sobre la Mujer logró convertirse en el principal foro de negociación de una Agenda Regional de Género amplia, profunda e integral, valoró la Cepal.
Ministras y altas autoridades de los mecanismos para el adelanto de las mujeres, expertos del sistema de Naciones Unidas y representantes de agrupaciones sociales intervinieron en el encuentro, que rindió homenaje a la cubana Vilma Espín, presidenta de la Primera Conferencia Regional de 1977.
En aquella cita, los gobiernos acordaron el primer Plan de Acción Regional a favor de los derechos y la autonomía de las mujeres y la igualdad de género.
Al decir de Bárcena, quienes acudieron a aquella reunión en La Habana, «asistieron a la fragua de un encuentro que en el entorno de América Latina y el Caribe sonaba muy radical, al hablar de igualdad de derechos en una hora en que la subordinación, la dependencia y el anonimato en las reivindicaciones de género eran la norma».
Aprobada en octubre de 2016, la Estrategia de Montevideo para la Implementación de la Agenda Regional de Género en el Marco del Desarrollo Sostenible hacia 2030 es resultado del camino labrado durante años, estimó.
Pero, aseveró, «nos falta dar un paso más; vamos a Lima, Perú (en próxima reunión), a asegurar que los ministros de Planificación de los países de la región incorporen los planes de igualdad en los planes nacionales de desarrollo».
Según anunció Bárcena, la Decimocuarta Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, fijada para 2019 en Santiago de Chile, abordará como tema principal la política económica, productiva y fiscal al servicio de la igualdad.
Santiago de Chile, 7 de octubre 2017
Crónica Digital /PL
