Sáb Dic 16 , 2017
Chile cuenta con cuarenta sitios de memoria actualmente organizados en la Red de Sitios de Memoria para la promoción de los Derechos Humanos y el fortalecimiento de la democracia, de los cuales nueve han sido recuperados en su totalidad, mientras que otros se encuentran en proceso de recuperación. El primer sitio recuperado en Chile y Latinoamérica fue Villa Grimaldi. Son veintidós, incluido el Archivo de Colonia Dignidad, los que han sido declarados por el Consejo de Monumentos como Monumentos Históricos Nacionales. Los informes oficiales reconocen 1.132 recintos de detención, entre los que figuran estadios, gimnasios, edificios, espacios públicos, casas particulares, tenencias, comisarías, regimientos, puentes, fosas, cementerios y calles (según datos del libro Patrimonio de la Memoria de los Derechos Humanos en Chile, del Consejo de Monumentos Nacionales). Recintos de prisión, tortura, exterminio y desaparición. La iniciativa de proteger la memoria de estos lugares nació desde las mismas organizaciones de derechos humanos provenientes de la sociedad civil. En el caso del primer sitio declarado monumento nacional, “las dirigentes de una de estas agrupaciones que reunían a los familiares de las víctimas de detenidos desaparecidos, (…) Sola Sierra y Viviana Díaz, fueron las que dieron la voz de alarma y lucharon para evitar que los Hornos de Lonquén, (…) donde se escondieron los restos de campesinos asesinados y que ya había sido destruido años antes, fuera convertido en un basural de la ciudad de Santiago”. En la búsqueda de una solución, y para evitar la destrucción total de los pocos vestigios restantes, se planteó su protección legal. Esta fue conseguida en 1996, siendo la primera vez que se declaraba como Monumento Nacional un sitio asociado a víctimas de crímenes de lesa humanidad en el país (según datos del libro Patrimonio de la Memoria de los Derechos Humanos en Chile). A nivel internacional, destacamos la existencia de la Red de Sitios de Memoria Latinoamericanos y Caribeños (RESLAC), que congrega a cuarenta organizaciones de doce países, y que a su vez forma parte de la Coalición Internacional de Sitios de Conciencia, institución que consta de siete sedes regionales a nivel mundial, incluyendo Asia, África, Europa, Latinoamérica, Centroamérica y Norteamérica. Todos los organismos que conforman la RESLAC trabajan en la “recuperación y construcción de las memorias colectivas acerca de las graves violaciones a los derechos humanos y las resistencias, ocurridas en la región durante el pasado reciente, en periodos de terrorismo de Estado, conflicto armado interno y altos niveles de impunidad, con el objetivo de promover la democracia y las garantías de no repetición”. Para ello, la Red desarrolla diversos proyectos e iniciativas en conjunto, donde la integración entre saberes y prácticas en el contexto continental resulta relevante y responde a la necesidad de entendernos como parte de una historia y de un mundo común, “procesos históricos vinculados por nexos indisolubles”, señala la RESLAC, cosa evidente si estudiamos nuestra historia reciente. Reforzar dichos vínculos no deja de ser un desafío al que hay que atender constantemente. La Red de Sitios de Memoria alberga entre sus […]