Si Washington reduce o suspende la ayuda a Pakistán o impone sanciones, el país revisará por completo su política hacia esa nación, subrayaron.
Las fuentes denunciaron que la Casa Blanca no presentó hasta la fecha ninguna prueba sobre el presunto respaldo de Islamabad a grupos radicales en Afganistán y que la estrategia norteamericana es culpar a este gobierno por sus errores en el vecino país.
The Express Tribune subraya que la Casa Blanca intensificó su presión tras el respaldo de Pakistán a una resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU que rechaza la decisión de Estados Unidos de reconocer a Jerusalén como capital de Israel.
Ayer la cancillería nacional convocó al embajador norteamericano, David Hale, para protestar por las palabras de Trump.
En sus primeros tuit de 2018 Trump lanzó duros ataques contra Pakistán, una situación ya recurrente.
‘Estados Unidos ha dado ingenuamente a Pakistán más de 33 mil millones de dólares de ayuda durante los pasados 15 años, y lo único que nos han dado ellos son mentiras y engaños…’, escribió el mandatario.
‘Dan refugio a los terroristas a los que perseguimos en Afganistán, y ayudan poco. ‘Se acabó’, advirtió.
Responderemos en breve. El mundo conocerá la verdad y las diferencias entre los hechos y ficción, afirmó en la misma red social el canciller pakistaní, Khawaja Asif.
La nueva Estrategia de Seguridad Nacional de Estados Unidos, anunciada el pasado mes, insistió en esas denuncias, lo cual fue muy criticado tanto por el gobierno y la oposición.
Desde que Trump lanzó esas acusaciones a mediados de 2017 numerosos políticos pakistaníes recordaron los sacrificios hechos por el país debido a su alineamiento con la guerra contra el terrorismo lanzada por Washington.
Islamabad, 2 diciembre 2018
Crónica Digital /PL
