Durante el año 2017, un colectivo de mujeres se inspiró en las canciones de la cantautora chilena para bordar arpilleras, en las que volcaron no sólo su creatividad sino también sus propias vidas. Son 60 obras que se presentan en el Archivo Nacional de Chile.
En el marco de los festejos del centenario de Violeta Parra, 60 mujeres recibieron su energía creadora, y dieron forma a arpilleras inspirada en alguna de sus composiciones musicales. Estas obras ahora se congregan en la exposición “Nuestra canción Violeta”, que se exhibe, hasta el viernes 9 de febrero, en el Archivo Nacional.
Estas mujeres reunidas en el Colectivo “Luces que brotan” poseen diversas profesiones y oficios, provienen de distintas localidades chilenas –Santiago, Peñaflor, Buin, Casablanca, El Carmen, Valparaíso, Puerto Varas–, y son de todas las edades, desde una niña de 10 años que ayudó a su mamá hasta varias abuelas que bordaron y estimularon a sus nietas a trabajar. Cada una de ellas profundizó con una canción en particular, durante el año 2017, plasmándola en una expresión plástica personal y única.
Paula Miranda, profesora de la Universidad Católica, en representación del colectivo, durante la inauguración de la muestra, expresó: “Todas las obras aquí expuestas recoge el encuentro luminoso de sesenta mujeres chilenas con su canción “violeta”, pero sobre todo, con trozos de sus propias vidas, de sus personales luchas y sueños.
En tanto, Emma De Ramón, directora del Archivo Nacional, manifestó que la institución acogía la muestra “como una experiencia artística muy significativa y que es mucho más que un préstamo de espacio para nosotras en la medida que estos testimonios visuales dialogan con la historia que hemos querido recopilar desde el 2011 en adelante a través del Archivo de Mujeres y Géneros”.
Miranda comentó que la característica del proyecto fue que se reunían cada cierto tiempo a compartir sus experiencias y compartir el proceso creativo. “Todas y cada una se sintieron convocadas por diversos motivos y sincronizadas para homenajear a Violeta Parra de la mejor manera que es posible hacerlo: creando obras, redes y nuevas maneras de imaginarnos; y sobre todo, promoviendo el trabajo comunitario desde la expresión artística”, explicó.
Las participantes son profesoras, asistentes sociales, artistas, terapeutas, literatas y cantoras, pero también hay una socióloga, una psicóloga, una bióloga, una fotógrafa, una publicista, una diseñadora, una enfermera y una ingeniera. Cada una bordó con técnicas distintas y formatos diversos.
Santiago de Chile, 15 de enero 2018
Crónica Digital
