La presión necesita ser ampliada en este momento, porque esa es la única manera de garantizar que no afecten la jubilación de los trabajadores y trabajadoras, insistió el máximo dirigente de la CUT, Vagner Freitas, en declaraciones amplificadas en el sitio web de esa organización.
Freitas recalcó asimismo que la batalla por garantizar el legítimo derecho de Lula a concurrir como candidato a los comicios de octubre venidero forma parte de la estrategia de los movimientos sindical y sociales, porque ello garantiza que los trabajadores podrán recuperar los derechos usurpados por el gobierno Temer.
El presidente nacional de la CUT recordó que Lula fue hasta ahora el único precandidato en anunciar que, si resulta electo, propondrá un referendo revocatorio para anular muchas de las medidas aprobadas por los golpistas, como la reforma laboral, el congelamiento de los gastos públicos por 20 años, y el paquete de privatizaciones.
La reforma del sistema de pensiones, impugnada por el 85 por ciento de la población brasileña según encuestas, debería ser votada la próxima semana en la Cámara de Diputados, mas esa posibilidad quedó casi sepultada ayer cuando Temer ordenó una intervención federal en el Estado de Río de Janeiro.
Según explicó el titular de esa Casa, Rodrigo Maia, la imposibilidad de debatir y aprobar la propuesta de enmienda constitucional (PEC) que rediseña el sistema jubilatorio obedece a que la Carta Magna no puede ser modificada cuando estuviera vigente una intervención federal, el estado de defensa o el estado de sitio.
Brasilia, 17 de febrero 2018
Crónica Digital /PL
