En menos de una semana pero con diferencias conceptuales, 94 venezolanos y 176 haitianos abandonaron Chile, en un proceso inédito de repatriación hacia sus respectivos países.
El caso de los venezolanos se corresponde con el plan de retorno establecido por el presidente Nicolás Maduro, denominado «Vuelta a la patria», el cual no tiene costo ni exige requisitos, ni tampoco un plazo de inscripción.
Los primeros 94 ciudadanos que prefirieron dejar Chile para reintegrarse a Venezuela tomaron en las últimas horas un avión charter de la aerolínea estatal venezolana Conviasa que partió desde Santiago rumbo a Caracas.
Según el embajador de la vecina nación, Arévalo Méndez, cerca de 200 personas mostraron interés en el programa que les permitirá volver a sus respectivas regiones y formar parte de un plan social para búsqueda de empleo y reinserción.
La fuente indicó que la iniciativa se replica en otros países como Colombia, Brasil, Perú, Ecuador y Argentina, con el objetivo de ofrecer nuevas oportunidades a quienes deseen regresar a Venezuela, tras el éxodo que trajo a Chile a unas 177 mil personas.
Otra cara de la moneda son los 176 ciudadanos haitianos fueron repatriados dentro del programa de retorno voluntario del Gobierno.
Se trata de una iniciativa del Ministerio del Interior para facilitar el regreso a su patria de ciudadanos haitianos que fracasaron en sus intentos de una vida mejor en Chile, por falta de trabajo, problemas con el idioma y el clima.
En ciertos casos carecían de visas de trabajo, otros se sintieron sobrexplotados y en líneas generales fracasaron en el intento de una vida mejor en la nación sudamericana.
Un avión de la Fuerza Aérea de Chile (FACH) fue facilitado por la administración de Sebastián Piñera para el regreso del primer grupo de haitianos.
En el Plan de Retorno Humanitario se inscribieron hasta el momento 1,087 haitianos.
Muchos de ellos afrontaron dificultades para legalizar sus papeles en Chile, un tema que toca a otras comunidades de inmigrantes, indicó el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla.
Santiago de Chile, 12 de noviembre 2018