El proyecto de acuerdo presentado por la derecha cuestionando la decisión administrativa y legal del gobierno venezolano adoptada hace ya varios meses de poner fin a la concesión del canal RCTV es un acto de intervención inaceptable en los asuntos internos de un país amigo, señaló el senador Alejandro Navarro.
Dijo que cuando el ex embajador venezolano opinó sobre un hecho histórico de Chile diciendo una verdad, se presionó hasta obtener su renuncia porque su opinión fue considerado como un acto de intervención, pero la presentación de este acuerdo se quiere mostrar como un acto de preocupación por la libertad de expresión.
No es posible -agregó- seguir aceptando esta actitud, este doble discurso cínico de la derecha, que como dijo Chávez, y tiene la razón, es la misma que anda promoviendo y celebrando golpes de Estado. Dónde estuvieron estos adalides de la libertad de expresión cuando el gobierno de Pinochet del que ellos participaron y profitaron cerraba diarios, revistas e incluso imprentas, apuntó.
Navarro indicó que el tema es más simple de lo que se quiere presentar. Uno no tiene que aceptar que el vecino le diga como debe hacer las cosas en su casa. Entonces no hagamos algo que no nos gusta que nos hagan. A muchos puede no parecerles la medida del gobierno venezolano, pero es legal y soberana. Lo importante es que en ese país hay democracia y estado de derecho, que funcionan las instituciones y que con la cancelación de una concesión de televisión abierta, que seguirá operando en el cable, no se ha afectado la libertad de expresión.
La medida adoptada por Chávez -añadió- es idéntica en las formas a la que adoptó el Presidente Aylwin en su momento cuando decidió, haciendo uso de una prerrogativa presidencial, cancelar la personalidad jurídica de Colonia Dignidad por las razones que todos conocemos. Pese a eso, sabemos que a algunos personeros de la derecha, que eran amigos de la Colonia no les gustó la medida y así lo hicieron saber por la prensa. ¿Habríamos aceptado que por esa medida, y sólo por poner un ejemplo, el Parlamento alemán hubiera aprobado un proyecto diciendo que esa medida violaba los derechos de los colonos?.
El legislador señaló que es lamentable esta provocación, que de manera planificada y sistemática la derecha hace contra el gobierno de Venezuela, en este caso con la intención clara de afectar la primera visita oficial de la Presidenta Bachelet a ese país con que tenemos tantos lazos construidos desde las luchas por la independencia. Se habla de Venezuela como si fuera el peor lugar del mundo, y lo más grave, no se respeta la voluntad soberana de sus habitantes, que en las pasadas elecciones dieron un apoyo mayoritario a Chávez reeligiéndolo.
No podemos seguir aceptando como normal -dijo- esta lógica de ensañamiento con Venezuela que ya se está convirtiendo en deporte habitual para la derecha y algunos otros personajes que le hacen el juego, operando desde las sombras movidos por sus propios intereses buscando obtener ventajas políticas. No es posible que la expectación de la visita de la Presidenta a Venezuela esté en ver si Chávez la abrazará o no, en lugar de los temas que se abordarán y la posibilidad de acordar temas de trabajo y cooperación entre ambas naciones, por ejemplo, en materia energética.
Navarro finalizó diciendo que pese a estos actos de provocación que no persiguen nada bueno, y sólo buscan generar efectos mediáticos a partir de las respuestas legítimas del gobierno venezolano, la amistad entre ambos gobiernos y pueblos seguirán afianzándose, porque la amistad que comenzó con OHiggins y Miranda y prosiguió con Andrés Bello, no se deteriora por la acción de aquellos que reniegan de la verdadera posibilidad de integración latinoamericana y que prefieren seguir siendo, legítimamente por cierto, más cercanos a Estados Unidos y su política hacia nuestra región.
Santiago de Chile, 13 de abril 2007
Crónica Digital
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