Con la ingesta de algunos pescados y vegetales con elevadas concentraciones de Omega-3, se reduciría el desarrollo de afecciones como la retinopatía del prematuro y la retinopatía diabética, una de las principales causas de ceguera en el mundo, cita el estudio.
Los investigadores, de varios centros científicos de Estados Unidos y Suecia, analizaron la proliferación creciente de vasos sanguíneos en la retina, característico de esas afecciones.
«Estos resultados indican que el aumento de las fuentes de Omega-3 o sus productos bioactivos reduce el desarrollo incontrolado de nuevos vasos sanguíneos», sostienen los autores del articulo de Nature Medicine.
En general, agregan, las dietas occidentales a menudo carecen de Omega 3, y los bebés prematuros están particularmente faltos de estos ácidos porque la madre se lo transmite durante el tercer trimestre de la gestación.
Londres, 25 de junio 2007
Prensa Latina , 0, 46, 10