El director de la cátedra de Teología y Ciencias de la Religión de la Universidad Carlos III, de Madrid, señaló a Prensa Latina como lo más triste de la contemporaneidad que el neoliberalismo además de las riquezas del planeta le robó a los pobres su esperanza de transformación.
Otros principios de esa doctrina económica que deben ser combatidos resultan los de la competitividad y el interés, sentenció el religioso hispano quien participó en la Jornada de Reflexión que homenajeó en Caracas a monseñor Oscar Arnulfo Romero, en el aniversario 90 de su natalicio.
Ante esa realidad, la teología de la liberación propone como alternativa el proyecto socialista, acotó el religioso español tras apuntar la convergencia irrenunciable entre ambas vías de desarrollo humano.
La competitividad es el enunciado del sálvase quien pueda y el interés se basa en un crecimiento económico desbocado que no va acompañado de desarrollo humano, precisó.
Es un deseo del neoliberalismo que desaparezca esta ideología religiosa crítica que no se adecua al pensamiento único preconizado por la doctrina económica de la globalización, señaló el catedrático madrileño.
Tamayo recordó la definición que de la teología de la liberación dio uno de sus fundadores, el peruano Gustavo Gutiérrez, para quien se trata de una reflexión crítica sobre la praxis histórica a la luz de la palabra de Dios.
La llamada iglesia de los pobres está más activa que nunca porque se mueve en el horizonte de la razón práctica y se reconstruye en los procesos históricos, argumentó.
Lejos de apelar a las afirmaciones dogmáticas el movimiento (surgido en Latinoamérica a finales de los 60 del siglo anterior) reelabora sus presupuestos en el seno de los procesos de emancipación, sostiene Tamayo.
Labrar caminos comunes con los movimientos sociales, las organizaciones feministas y colectivos de derechos humanos es tarea cotidiana de la teología liberadora contemporánea, apuntó.
Juan José Tamayo aboga porque el movimiento teólogico progresista trabaje en el empeño de lograr una sociedad antihegemónica, interreligiosa, intercultural, interétnica, interidentitaria e intercontinental.
La contemporaneidad, a su juicio, identifica ya varias tendencias de la teología liberadora: feminista, indígena, económica y afrolatinoamericana.
Caracas, 16 de agosto 2007
Prensa Latina , 0, 101, 19