En el capitalino velódromo del Estadio Nacional, ante miles de chilenos, Lage manifestó que Cuba supo luchar contra acciones terroristas y sin inclinar jamás su frente.
El bloqueo contra Cuba ha sido recrudecido por el actual gobierno del presidente George W. Bush, que ha ordenado multas contra 90 empresas y bancos estadounidenses simplemente por tener negocios con la isla caribeña, sostuvo.
También afirmó que unas 15 empresas dedicadas a permitir las relaciones entre familias cubanas que viven en Estados Unidos y en Cuba fueron canceladas para impedir el envío de remesas y que los cubanos radicados en tierras norteamericanas viajen a la Isla.
El dirigente cubano expresó en ese sentido que Washington aumentó las presiones sobre empresas y gobiernos para aislar a Cuba, pero «el mundo le dio una respuesta en Naciones Unidas, donde 184 países votaron una vez más contra el bloqueo imperialista», puntualizó.
Ese gobierno -expresó- también descarga todo su odio sobre cinco jóvenes cubanos prisioneros políticos en cárceles estadounidenses, a quienes desde aquí les envío un mensaje de aliento y admiración por su valor, entereza y heroísmo.
Denunció, por otro lado, que la administración Bush provocó una guerra contra Iraq en busca de petróleo y para seguir manteniendo a Estados Unidos, que con sólo el cinco por ciento de la población mundial consume el 25 por ciento del petróleo del mundo.
Al valorar la herencia dejada por el neoliberalismo, consideró que ese modelo es causante de que 200 millones de latinoamericanos vivan en la pobreza y otros 79 millones en la indigencia.
Lage señaló que, no obstante, ya no son los tiempos del neoliberalismo, en que las transnacionales, el Consenso de Washington, «y todos esos inventos macabros» permitían a las empresas privadas y los países ricos apropiarse de la riqueza de Latinoamérica.
Santiago de Chile, 11 de noviembre 2007
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