El mandatario celebró la conclusión de la nueva carta magna, a pesar de los grupos conservadores que intentaron impedir la transformación democrática y pacífica reclamada por el pueblo.
Morales saludó el nuevo texto constitucional poco antes de viajar a Argentina para la creación del Banco del Sur y la toma de posesión de la presidenta electa, Cristina Fernández.
Destacó la representatividad lograda en la Asamblea Constituyente, donde participaron delegados de los nueve departamentos bolivianos y la mayoría de las bancadas políticas.
Valoró el esfuerzo colectivo, los debates y consultas en diversos sectores por más de un año, con resultados favorables al actual proceso nacional de cambios democráticos.
El presidente aplaudió el establecimiento en la constitución de políticas de inclusión social, como las autonomías departamentales, regionales e indígenas.
Además resaltó el planteamiento de una economía mixta y plural, que respeta la propiedad privada, publica y estatal, e incorpora la economía comunal, en cooperativas, asociaciones y corporaciones.
También destacó la declaración de los servicios básicos como un derecho humano, y el rechazo a la existencia de bases militares extranjeras en territorio boliviano.
Consideró positivo que pensiones para escolares y ancianos aparezcan oficializadas en esta carta magna, así como la realización de un referendo para definir el futuro del latifundio.
Respecto a la aprobación de una reelección continua, Morales negó estar aferrado a la presidencia, como demuestra su reciente llamado a un referendo revocatorio de su mandato y el de los nueve prefectos departamentales.
La Paz, 9 de diciembre 2007
Prensa Latina , 0, 52, 11