Con un final inesperado por el dolor de la tragedia urbana en Rosario, cerró la campaña electoral a la que hoy temprano se le impuso una veda antes de los comicios primarios, abiertos y obligatorios del domingo 11.
Signado por el duelo nacional tras la mortífera explosión de gas que destruyó la mañana del martes un edificio del centro rosarino y dejó, hasta el momento, 13 muertos y ocho desaparecidos, varias formaciones políticas cancelaron sus actos finales de campaña.
No obstante, pese al duelo nacional, líderes de la oposición en la Capital Federal incitaron a una protesta anoche contra el gobierno nacional de la presidenta Cristina Fernández, pero la convocatoria -alentada por los medios hegemónicos- tuvo en realidad poca adhesión pública.
Acorde con el Código Electoral Nacional se suspendieron hoy a partir de las 08:00, hora argentina, todos los actos públicos 48 horas antes del sufragio, a los fines de asegurar el normal desarrollo de las elecciones.
La veda se extiende hasta la clausura de la votación el domingo, y durante ese tiempo están prohibido los espectáculos populares al aire libre, en recintos cerrados, las fiestas teatrales y deportivas, así como toda clase reunión pública referida al acto electoral.
No se podrá publicar o difundir encuestas ni proyecciones sobre el resultado de la elección, como tampoco distribuir boletas de sufragios a los electores, realizar actos públicos de proselitismo, la emisión y publicación de avisos publicitarios en medios televisivos, radiales y gráficos, ni desde cuentas de redes sociales de políticos o partidos.
Tampoco se puede hacer uso de banderas, divisas u otros distintivos ni tener abiertas las casas destinadas al expendio de cualquier clase de bebidas alcohólicas.
Sin embargo, quedarán por ciudades y pueblos la propaganda de carteles ya desplegada durante el último mes; no hay tiempo para bajarlos.
Antes de la declaración oficial de la veda los candidatos legislativos aprovecharon para participar en programas de radio y televisión desde casi el despuntar del día, que convirtieron prácticamente las ondas radiales y señales televisivas en una pasarela electoral. Pero todo terminó a las 08:00 horas.
Los medios audiovisuales difundieron hoy las últimas encuestas antes de la veda, pero estas permanecen, claro, en los diarios para el resto del día.
Clarín y otros medios enemigos acérrimos del bloque de gobierno resaltaron como gran ventaja en la provincia de Buenos Aires, la de Sergio Massa, del Frente Renovador, sobre el candidato del oficialista Frente para la Victoria (FpV), Martin Insaurralde.
Pero un análisis más objetivo a partir de resultados convergentes de otros sondeos más neutrales muestra que el FpV como la primera fuerza a escala nacional, en tanto en la provincia bonaerense el final está abierto entre Massa e Insaurralde.
Incluso, una encuesta de Poliarquía para el diario La Nación, también alineado con la oposición, confirma que Insaurralde ha cerrado la brecha, que era de 11 puntos el 5 de julio, y a inicio de semana, cuando se realizó la consulta, ya era de 2,7 unidades.
O sea, Massa sigue arriba en la provincia de Buenos Aires según Poliarquía con 32,8 por ciento, pero Insaurralde llegó a 30,1 por ciento, mientras otros sondeos muestran un empate técnico con una diferencia de tan solo 0,3 por ciento.
Por Martin Hacthoun
Buenos Aires, 9 de agosto 2013
Prensa Latina
