Este martes la Cámara de Diputados aprobó de manera unánime el proyecto de ley que busca sancionar a los medios de comunicación que promuevan estereotipos negativos hacia la mujer en mensajes publicitarios, a partir de la modificación de la ley N° 19.496 sobre protección de los derechos de los consumidores.
La moción presentada por las diputadas de Chile Vamos Claudia Nogueira, María José Hoffmann, Andrea Molina, Marcela Sabat, Paulina Núñez, Karla Rubilar y Marisol Turres, consideraría como conducta infraccional este tipo de publicidad discriminatoria, que será sancionada con una multa de hasta 50 UTM (cerca de $2.299.950), conforme al artículo 24 de la ley del consumidor.
Sin embargo, para que la infracción pueda ser sancionada, debe ser necesario que la víctima de la conducta sea un «consumidor» en los términos del artículo 2º de esa ley, esto es, “una persona natural o jurídica que, en virtud de cualquier acto jurídico oneroso, adquiera, utilice, o disfrute, como destinatario final, bienes o servicios”. Es decir, no bastaría la conducta que se pretende sancionar sea efectivamente realizada por un proveedor de bienes y servicios, sino que además sería necesario que exista entre éste y un consumidor, una relación de consumo, por medio de la compra del producto que contenga publicidad con estereotipos contra la mujer.
Si bien la iniciativa fue valorada en los diversos sectores políticos, algunos parlamentarios manifestaron sus críticas, por lo que plantearon la indicación de nuevo artículo 31 bis en la ley N° 19.733 sobre Libertades de Opinión e Información y Ejercicio del Periodismo, que establezca ampliar la libre denuncia de cualquier ciudadano o ciudadana a los medios de comunicación social donde se promuevan estereotipos negativos hacia la mujer mediante mensajes publicitarios.
Sobre este punto, la presidenta del Colegio de Periodistas Javiera Olivares, indicó: “Si bien es oportuno abrir el debate para regular a aquellos medios que difundan publicidad con estereotipos negativos hacia la mujer, me parece lamentable que se reduzca a la relación de consumo. Cualquier ciudadano o ciudadana debe tener potestad para denunciar a quien difunde y cultiva prácticas sexistas o discriminatorias, así se crea una cultura garantista en democracia, cuidando los derechos de las personas y no de los consumidores. Por otro lado, es lamentable que esta u otra moción aún no atienda otros problemas centrales de la discriminación de género, como la diferencia de salarios entre distintos sexos o el acceso de la mujer a puestos de trabajo sin el riesgo de no ser contratada por un eventual embarazo”.
Así las cosas, las indicaciones al proyecto de ley aún están a la espera de ser discutidas y votadas de manera particular en la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados, durante esta y las próximas semanas. El proyecto de ley espera la urgencia del Ejecutivo, para luego seguir su curso en el senado.
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