Tras conocerse casos como el juego suicida de “La Ballena Azul” y a raíz de que el suicidio no está sancionado en nuestra legislación, diputados de las bancadas PPD, DC, PS, PC y UDI, encabezados por la diputada Cristina Girardi, presentaron un proyecto de Ley que modifica el Código Penal estableciendo el delito de inducción al suicidio.
Al respecto, la diputada Girardi autora y principal impulsora de la iniciativa legal explicó que el texto establece que “el que indujere, dirija, o aconseje a otro, aún en contra de su voluntad, a que se suicide, mediante estímulos, bajo amenazas, emitiéndole órdenes concretas, personalmente o, a través de cualquier medio, será autor del delito de inducción al suicidio, el que será sancionado con la pena de presidio mayor en su grado medio”.
De igual manera, agrega Cristina Girardi, que “la iniciativa considera que, la misma pena aplica a quien indirectamente, indujere, dirija o aconseje a otro, aún en contra de su voluntad, a causarse lesiones, mediante estímulos, bajo amenazas o cooperando en esta labor o en otras circunstancias que atenten contra su integridad física, emitiéndole órdenes concretas o, a través de un soporte digital”.
La diputada Girardi recalcó que “es de público conocimiento que en Chile existen figuras legales de delitos que ponen termino a la vida tales como el femicidio y el homicidio, sin embargo, nada dice respecto a nuevas formas de poner término a la vida de una persona mediante presiones ilegítimas de terceros; es el caso del suicidio asistido”.
En este sentido, recordó el caso de la joven, Antonia Garros (23 años), fallecida el pasado 7 de febrero por un presunto suicidio, quien cayó desde el piso 13 de un edificio en Concepción y generó una importante movilización que trajo de nuevo a la palestra el hostigamiento que muchas mujeres sufren en silencio hasta que éste termina en un crimen mayor o en la autoeliminación. “En este particular y bullado caso, las denuncia por violencia interpuesta por la víctima fue reconocida por su victimario, cada uno de los hechos por la víctima descritos, sin embargo, como se trataba de un pololeo y no de una relación de convivencia, no tuvo repercusiones para el agresor”, explicó.
Además, expuso la parlamentaria, que en la actualidad se están generando otros fenómenos como el denominado desafío de la -Ballena Azul-, un macabro reto busca el suicidio de niños y adolescentes que en 50 días deben preparar su muerte con laceraciones en su cuerpo. En Chile, el primer caso se registró el miércoles 26 de abril de 2017 en Antofagasta, donde una menor de 12 años estuvo a punto de alcanzar el punto cinco hasta que su madre la descubrió. “De ahí la importancia de ingresar y tramitar con celeridad esta iniciativa”, aseveró.
Por su parte la diputada DC, Yasna Provoste, sostuvo que “la legislación también tiene que ponerse en sintonía y poder sancionar a aquellos que ejercen una presión ilegitima, que finalmente termina con una secuencia de situaciones que en muchos casos concluye en la perdida de la vida”.
“Creemos que en ese sentido, también el parlamento debe actuar con celeridad para poder poner término y sancionar drásticamente estas presiones ilegitimas que se constituyen a través de distintos medios, no sólo a través de la red, el teléfono o distintos vías, que finalmente generan un deterioro tan importante o este miedo en las víctimas que terminan quitándose la vida. Por lo tanto, queremos hacer un llamado para que el parlamento pueda tramitar con celeridad esta iniciativa”, indicó la legisladora.
Por último, el diputado UDI, Jaime Bellolio, indicó que “todos quienes somos papás, quienes son mamás saben que hoy día internet es el nuevo espacio público. Y así como educamos a nuestros hijos para que tengan cuidado con lo que ocurre en la calle y existen sanciones si una persona daña a otra en la calle, hoy día internet y las redes sociales son un nuevo espacio público, por lo que tenemos que modernizar y legislar para enfrentar esto”
“Hoy día conocimos el ‘juego’ de la ballena azul, hay otras series que terminan en otra cuestión similar, y cualquier tipo de inducción a hacerse daño a las personas, especialmente cuando son menores, es algo de la mayor gravedad y este proyecto de ley busca hacerse cargo de ello”, concluyó.
Santiago de Chile, 5 de mayo 2017
Crónica Digital