Considerando que en la actualidad la gran mayoría de la sociedad chilena tiene la posibilidad de acceder a un vehículo, cada vez son más los automóviles que circulan en las calles y, así mismo, más las probabilidades de tener accidentes de tránsito. En gran parte, los accidentes se deben a la falta de cultura de los conductores de la ciudad, pero realmente las principales causas de estos incidentes se pueden ver influenciadas por muchos factores: tráfico, inconsciencia de parte de los automovilistas, estrés, desobedecer normas de tránsito y consumo de drogas y alcohol.
La ingesta de estas sustancias es una problemática real en el país, especialmente entre jóvenes que suelen salir a fiestas por las noches y deciden conducir bajo estos efectos sin medir las consecuencias que pueden tener sus actos. Además de esto, las muertes por accidente de tránsito presentan un número muy elevado en Chile, si bien éstas se han reducido en los últimos años, aún sigue siendo una realidad latente que el Gobierno y las autoridades pertinentes deben mejorar.
Por estas razones, y considerando que este tipo de eventos son una epidemia a nivel mundial, una de las metas que ha propuesto la Organización Panamericana de la Salud (OPS) es reducir el número de muertes por accidentes automovilísticos al menos en un 50 % para el año 2020. En este sentido, el Ejecutivo está dispuesto a preparar algunas medidas para disminuir la escala de siniestros en las vías, como es el caso de la aplicación de test antidroga a los conductores, durante controles de tránsito.
Aunque desde hace algún tiempo en Chile ya se implementa la medición con el alcotest, el secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Seguridad del Tránsito (Conaset), Luis Stuven, asegura que se necesitan mayores señales que puedan detectar el consumo de sustancias como la marihuana y cocaína, las cuales provocan efectos bajo los cuales ninguna persona sería capaz de manejar de manera segura y correcta. Así mismo, aseguran que este nuevo sistema de seguridad vial podría empezar a aplicarse este mismo año.
La idea principal es comenzar realizando una prueba piloto con dispositivos que sean capaces de determinar el consumo de las drogas mencionadas por medio de una muestra de saliva, pero no existe aún una tipificación legal especifica que aborde el uso de estas sustancias al conducir, lo que llevaría a los conductores a cuestionar la medición. De igual forma, este proyecto está siendo trabajado con la Subsecretaría de Prevención de Delito según añadió el secretario ejecutivo Luis Stuven.
Por otro lado, la encargada de la seguridad vial de la OPS, Eugenia Rodríguez, afirma que existen pruebas de que la atención de las personas que consumen estupefacientes estando al volante se ve perjudicada considerablemente, lo que lleva a disminuir el nivel de capacidad de los conductores. Por ello, se debe estar consciente de los riesgos que puede causar el no optar ahora por medidas seguras que puedan evitar la conducción de conductores con los sentidos alterados. De aprobarse esta propuesta, será posible estabilizar las cifras de siniestros viales en el país.
Esto sería de gran ayuda para la sociedad y protegería tanto la vida de los habitantes como la seguridad de sus vehículos, que muchas veces se ven involucrados en accidentes por imprudencia de otros conductores que causan pérdidas totales, lo que perjudica en gran medida a quienes no cuentan con un seguro de autos confiable.
Santiago de Chile, 29 de junio 2018
Crónica Digital /estoyseguro.cl