Chile aspira a dar un salto definitivo al desarrollo en el curso de una década, con la ventaja de ser un país abierto al comercio que puede resistir mejor los vaivenes de la economía mundial.
Hay muchas variables en el ambiente, pero dentro de lo posible vemos un escenario por ahora favorable, completó la idea del ministro de Economía, Fomento y Turismo de Chile, José Ramón Valente, al responder a preguntas de Prensa Latina.
Los Tratados de Libre Comercio (TLC) son una vocación que tiene el país austral y que refrendó Valente como una virtud con excelentes proyecciones.
«Tenemos nexos con el 90 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del mundo (en forma de TLC o de acuerdos de amplio alcance) y estamos en negociaciones con la ASEAN para un proceso de integración», explicó.
El titular se refería así a la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), en un encuentro con corresponsales de la prensa extranjera en Chile.
Precisamente uno de los integrantes de la ASEAN, Vietnam, estará con una representación de alto nivel la próxima semana en esta capital, con la visita del viceprimer ministro, Hue Vuong Dinh.
A otra inquietud de Prensa Latina, el secretario de estado valoró el avance sostenido de la industria del turismo en Chile, que muestra un enorme potencial por la belleza de sus parajes únicos.
Sin embargo, Valente admitió que habrá que poner énfasis en infraestructura y capacitación de personal (en particular con el aprendizaje de idiomas foráneos), y tomar en cuenta que los dos años de boom de viajeros argentinos bajarán.
Chile llegó a registrar el pasado año 6,7 millones de turistas extranjeros y los argentinos pusieron de moda la tendencia de venir de compras, pero la situación ha variado en el vecino país y no parece algo que seguirá.
En otro orden, Valente se refirió a los vaivenes del dólar y la eventualidad de una guerra comercial entre Estados Unidos y China.
Hasta ahora el peso chileno ha resistido sin demasiados sobresaltos, no hay peligro de contagio ante probables crisis en Argentina y Brasil, y por supuesto esperaríamos que al final se resuelva el conflicto entre Washington y Beijing, argumentó.
El ministro hizo hincapié en las ventajas de mantener una economía abierta y destacó que en su cartera se trabaja ahora en incrementar las inversiones, productividad y competitividad.
«Hemos tomado nota de ejemplos de Australia, Nueva Zelanda, Canadá y el Reino Unido en ese sentido. La idea del gobierno de Sebastián Piñera es lograr en el largo plazo y crecimiento sostenido del cuatro por ciento para lograr el desarrollo», puntualizó.
Crónica Digital /PL