Según un comunicado, los obispos de Chile repasarán la situación actual en torno a la friolera de denuncias de delitos de abusos sexuales cometidos por ministros de la fe católica a lo largo de varios años.
La fuente señaló que la agenda de la cita se concentrará en ‘definir los caminos a seguir a nivel nacional y algunos lineamientos generales y específicos para las diócesis’, en razón de los escándalos que sacuden a la Iglesia católica.
‘Será una importante contribución en el discernimiento sobre los mejores caminos de renovación en los que se debe avanzar’, declaró monseñor Santiago Silva, presidente de la Conferencia Episcopal.
Añadió que el grupo es del todo consciente ‘que el Señor de la historia, Jesucristo, sabrá hacer renovaciones fundamentales con corazones bien dispuestos’.
Durante la semana pasada, se conoció que otro sacerdote fue suspendido de sus funciones por el arzobispado de Puerto Montt, luego de recibir una denuncia de abuso sexual a un menor, un nuevo capítulo en los escándalos de la Iglesia católica.
El nuevo expediente fue abierto contra el cura Dionisio Muñoz Aro en Puerto Montt, a poco más de mil kilómetros al sur de Santiago, y subraya el comunicado que se inicio una investigación para determinar la veracidad del asunto.
Las tensiones en el entorno de la Iglesia católica de Chile siguieron en días recientes con desplantes al arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, y procesos judiciales que abarcan también a monjas superioras.
El panorama apunta directamente a las decenas de casos de abusos sexuales cometidos por ministros de la fe católica en un destape sin precedentes. Dos visitas a Chile de enviados del Vaticano, aceleraron las denuncias.
En la mesa del papa Francisco se mantienen las cartas de renuncia de los obispos de Chile. Hasta el momento aceptó cinco pero es probable que los escándalos aquí hagan conveniente que el Santo Padre de curso a otras dimisiones.
Santiago de Chile, 30 de julio 2018
Crónica Digital /PL