Agrupaciones de familiares de detenidos desaparecidos y ejecutados políticos en Chile valoraron la postura de la CIDH sobre la liberación de asesinos de la dictadura de Augusto Pinochet.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) fustigó este viernes, desde su sede en Washington, el dictamen de la Corte Suprema de de Chile de otorgar libertad condicional a exmilitares condenados por crímenes de lesa humanidad.
Recordó que en relación con penas impuestas por graves violaciones a los derechos humanos, la CIDH se ha referido «al deber estatal de abstenerse de recurrir a figuras que pretendan suprimir los efectos de la sentencia».
Justamente, los comentarios de la institución adjunta a la OEA están en línea con la exigencia de la oposición en Chile, donde los partidos de centroizquierda solicitaron que se le pida cuentas al Estado del país austral acerca de lo ocurrido.
Las organizaciones Socialista, Por la Democracia, Comunista y varias del Frente Amplio elaboraron un texto que dirigieron a la CIDH para que examine los expedientes y demande en particular al actual Gobierno de Chile su parecer.
El presidente del Partido Socialista, Alvaro Elizalde, al igual que actual titular del Senado, Carlos Montes, reiteraron que el derecho internacional establece que para reconocer la libertad condicional debe existir cooperación y arrepentimiento.
Ninguno de los liberados cumplió esos requisitos, lo cual provocó la indignación de cientos de personas que claman en el país austral por verdad y justicia, tras la sangrienta secuela dejada por la junta militar pinochetista.
Esta semana, cientos de personas tomaron parte en una velada político-cultural en la sede del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, después de que la administración de Sebastián Piñera se viera obligada a sacar a su ministro de Cultura.
El acto se dio en respaldo al centro y de repudio a los comentarios del fallido secretario de Estado Mauricio Rojas, quien apenas duró poco más de 72 horas en el cargo, tras desbarrar del museo al calificarlo de «montaje» para manipular la historia.
El masivo acto fue bautizado con el nombre de #YoProtejoLaMemoria, y contó con la presencia de Raúl Zurita, Premio Nacional de Literatura e Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda, e inspirador de la campaña que sirvió para desbancar a Rojas.
De otra parte, el Comité contra la Tortura de las Naciones Unidas instó al Estado de Chile a garantizar que los violadores de derechos humanos cumplan penas efectivas.
«Se insta al Estado a continuar el enjuiciamiento de violaciones de derechos humanos y a garantizar que sus autores sean condenados conforme a la gravedad de sus actos, velando por el cumplimiento de las penas, excluyendo posibles amnistías o indultos», remarcó.
Santiago de Chile, 18 de agosto 2018
Crónica Digital /PL