El Gobierno de Chile decidió suspender por tiempo indefinido las actividades de una refinería en la central región de Valparaíso, después que más de un centenar de personas resultara afectado por gases.
La organización ecologista Greenpeace calificó con dureza lo ocurrido y llamó el caso como «el Chernobil chileno», estableciendo un paralelo con la tragedia en la planta nuclear ucraniana en 1986.
Greenpeace dijo en un comunicado que el sacrificio medio ambiental que los habitantes de las zonas de Quintero y Puchuncaví han debido soportar durante años, volvió a manifestarse en una nueva emergencia.
«Se trata de una zona de sacrificio medio ambiental que obliga a tomar medidas serias y definitivas. Lo claro es que, con esta realidad, ya no pueden convivir las industrias y la población afectada», sentenció.
Vecinos de las localidades de Quinteros y Puchincaví fueron al hospital local con náuseas y vómitos como consecuencia de sustancias contaminantes en el ambiente, lo cual llevó a la paralización de la empresa estatal Enap.
«Tenemos evidencia suficiente para establecer que se han emitido contaminantes en el aire nocivos para la salud desde la empresa Enap», aseguró a la televisión local Jorge Martinez, Intendente (gobernador) de Valparaíso.
La ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, solicitó a la Superintendencia del dominio que decretara el cierre temporal parcial de la Refinería.
«Es inaceptable lo que ha estado sucediendo en Quintero los últimos días. Desde el martes, como Ministerio del Medio Ambiente, hemos estado en la zona con un medidor especializado de gases (…) hemos detectado emanación de gases tóxicos», anotó.
La Oficina Nacional de Emergencia (Onem) indicó a su turno, que se detectó en la zona la presencia de ‘Metolcloroformo, Nitrobenceno y Tolueno en el ambiente», sin determinar si un material amarillo en el ambiente es polen o se relaciona con azufre.
Según la Onem «133 personas resultaron intoxicadas por contaminación atmosférica», y muchas actividades en esa zona fueron suspendidas, como las clases en los centros escolares.
«No basta con seguir midiendo el aire ni llevando a los afectados a los consultorios cada vez que se registra una emergencia», enfatizó Greenpeace, mientras vecinos de Quinteros protestaron y exigieron medidas urgentes al Gobierno.
Santiago de Chile, 25 de agosto 2018
Crónica Digital /PL