El papa Francisco aceptó hoy las renuncias de los obispos chilenos Carlos Eduardo Pellegrín y Cristián Enrique Contreras, involucrados en el escándalo por abusos sexuales y de poder cometidos por el clero de ese país.
Según un comunicado de la Sala de Prensa de la Santa Sede, Pellegrín y Contreras fueron sustituidos por los administradores apostólicos de sedes vacantes Sergio Hernán Pérez de Arce y Jaime Ortiz de Lazcano, en la diócesis de San Bertolomé de Chillán y San Felipe, respectivamente.
Con estas suman siete las destituciones de prelados de la nación suramericana ordenadas por Francisco desde el 17 de mayo último, cuando los 34 obispos chilenos, 31 en servicio y tres eméritos, renunciaron en bloque tras un encuentro de tres días con él, quien los convocó a Roma para analizar lo ocurrido.
La dimisión colectiva tuvo el propósito de dejar las manos libres al sumo pontífice para tomar las decisiones que considerara pertinentes y fue así como el 11 de junio removió a Juan Barros, Cristián Caro y Gonzalo Duarte y 20 días después a Horacio del Carmen Valenzuela y Alejandro Goic.
Roma, 21 de septiembre 2018
Crónica Digital /PL