Por segunda vez el sitio de memoria Parque por la Paz Villa Grimaldi fue agredido por el Movimiento Social Patriota, instalando un lienzo en el frontis del espacio, en el que se indica “No lucren más con los DD.HH.”, acción que al igual que la anterior busca amenazarnos e intimidarnos en nuestra labor.
(Noticia en desarrollo).
Santiago de Chile, 10 de enero 2019
Crónica Digital /villagrimaldi.cl
Vie Ene 11 , 2019
Por Odalys Troya Flores * Las caravanas de migrantes centroamericanos hacia Estados Unidos a fines de 2018, evidenciadas en casi todos los medios de prensa de Latinoamérica, fueron un reflejo de la infausta vida de los protagonistas de esa historia. El 13 de octubre de 2018, unos mil hondureños partieron de San Pedro Sula en busca del sueño americano y en esa ruta también cientos de guatemaltecos y en menor medida, decenas de salvadoreños se unieron al éxodo. Empujados por la violencia, la pobreza, la falta de acceso a servicios esenciales comenzó la dramática caravana integrada por campesinos, pescadores, obreros, mujeres y niños. Cargaban sobre su espalda la miseria y con ese peso intentaban algunos llegar a México e instalarse en ese país, otra cantidad mayor deseaba cruzar la frontera para ingresar a Estados Unidos. En el camino encontraron el apoyo de muchas personas humildes quienes les ayudaron con alimentos, agua, medicinas, cobertores para pasar el frío de las noches o solo con el aliento para estimularlos a seguir el largo recorrido de más de tres mil kilómetros. Pero también tropezaron con la represalia de la policía mexicana y el anuncio del presidente Donald Trump de enviar a centenares de soldados estadounidenses a la frontera. La gran caravana llegó a tener a unos 15 mil migrantes de la región quienes se apoyaron mutuamente para evitar las dificultades que este viaje lleva consigo históricamente (asaltos, violaciones, crímenes y accidentes). Esta vez fue un grupo internacional unido que no logró todos sus objetivos, pero al menos puso de relieve un tema que en Centroamérica no es nada nuevo, aunque se obvia con facilidad. EN CENTROAMÉRICA No se puede hablar de la historia de la humanidad sin mencionar las grandes migraciones que comenzaron hace unos 70 mil años porque lo que es hoy un problema para Europa o Estados Unidos, fue siempre parte de la vida de los seres humanos. ¿Qué empuja a los centroamericanos a huir de sus países de origen? Se trata de una pregunta con respuestas sobradas desde hace siglos. Antes del colonialismo, los pueblos originarios de esta región se desplazaban de un sitio a otro por motivos muy poderosos como el hambre, la guerra y quizá las enfermedades que los obligaban a emigrar y alejarse para siempre de su lugar nativo. Solo por poner un ejemplo, cuentan que con la destrucción de Tula, la prodigiosa ciudad de los toltecas, al parecer por las invasiones chichimecas en el siglo XII, se inició la emigración y expansión de grupos toltecas-nahuas a lo largo de Mesoamérica. Más tarde, con la llegada de los colonizadores europeos, los pueblos indígenas tuvieron que desplazarse de sus asentamientos ante la dominación de los intrusos. Luego llegaron las guerras por la independencia de la corona española, el robo de las tierras ejidales por las familias poderosas, las luchas sociales, los golpes de Estado, las dictaduras militares, las guerras, las prácticas neoliberales, fenómenos todos que engendraron los males que inundan hoy a estos países y estimula la […]