Las candidatas demócratas Lori Lightfoot y Toni Preckwinkle pretenden conseguir hoy la alcaldía de la ciudad estadounidense de Chicago, Illinois, en unas elecciones calificadas de históricas para esa urbe.
Con su triunfo en las urnas, una de ellas se convertirá en la primera afronorteamericana en lograr tal puesto allí, donde existe un elevado número de crímenes y resultan frecuentes las denuncias debido al uso excesivo de la fuerza por parte de la policía.
De acuerdo con Reflective Democracy Campaign, que analiza la demografía del poder en Estados Unidos, el hecho resulta inusual en este país pues apenas el seis por ciento de los alcaldes de las 200 ciudades más grandes son mujeres negras.
“Estamos en un momento histórico para Chicago, los tiempos han cambiado y es hora de algo nuevo”, expresó después de votar en el sector norte la profesora Jhoanna Maldonado.
Tras la primera ronda electoral celebrada en febrero con 14 aspirantes, Lightfoot, de 56 años, y Preckwinkle, de 72, lograron pasar a la etapa final, y la vencedora reemplazará a Rahm Emanuel, quien anunció en septiembre que no perseguiría un tercer mandato.
Abiertamente lesbiana, Lightfoot lanzó su campaña con la promesa de hacer reformas policiales y enfatizó en el descontento general por la muerte del joven negro Laquan McDonald a manos de un uniformado.
“No soy alguien que ascendió los escalafones de un partido político corrupto”, y “nunca tuve título de jefa del comité ni de presidenta del partido”, manifestó en un debate el mes pasado.
Informaciones de prensa recordaron que tales declaraciones fueron críticas solapadas a Preckwinkle, quien encabeza el capítulo local del Partido Demócrata y respondió que su rival no tiene la experiencia necesaria para el cargo.
“Resulta fácil hablar de cambios, pero es difícil lograrlos de verdad. Y esa ha sido mi experiencia: ser un agente de cambio, un agente transformador, tener la capacidad de transformar instituciones y comunidades”, afirmó Preckwinkle.
Los anuncios de campaña de esta última candidata acusaron a Lightfoot de ser “una acaudalada abogada corporativa” puesto que trabajó para Mayer Brown, una firma de letrados con oficinas en América, Asia, Europa y Medio Oriente.
Por su parte, Lightfoot contestó que su contrincante estaba recurriendo a la publicidad negativa, y denunció los vínculos de Preckwinkle con poderosos políticos demócratas.
Washington, 2 abril 2019
Crónica Digital / Prensa Latina.