Apenas la mitad de la población femenina de Chile en condiciones de trabajar está empleada, reveló una encuesta sobre Caracterización Socioeconómica Nacional, cuyos resultados fueron presentados por el Ministerio de la Mujer.
El estudio, correspondiente a la situación en 2017, no presentó cambios significativos respecto al sondeo realizado en 2015, y en cuanto a la participación laboral señala que la proporción de mujeres es del 48,9 por ciento, mientras que en el caso de los hombres es de 70 por ciento.
La encuesta reveló además que una de cada tres mujeres no tiene ingresos propios y una de cada cinco no trabaja por tener que atender los quehaceres del hogar o cuidar a niños o ancianos.
Respecto a este último aspecto la viceministra Carolina Cuevas aseguró al presentar los resultados del estudio que es necesario un cambio cultural respecto a la responsabilidad sobre los hijos y su cuidado, ya que aseguró que el 97 por ciento de las personas que están fuera de la fuerza laboral por razones familiares son mujeres.
La abogada de la Corporación Humanas, Camila Maturana, advirtió además que existen aspectos importantes que no se reflejan en los resultados de la pesquisa, como son la sobrecarga de trabajo remunerado o no remunerado que tienen las féminas, y la distribución desigual de las labores en el ámbito doméstico, entre otros.
Al respecto añadió que si no han existido avances en esos asuntos es porque no se han impulsado políticas de corresponsabilidad entre hombres y mujeres.
Asimismo, la encuesta reveló que en términos de ingreso familiar, el 38,5 por ciento de los hogares en Chile tiene a una mujer como la principal fuente de sustento, y del total de ingresos que recibe la población el 39 por ciento es percibido por mujeres, mientras que el 61 corresponde a hombres.
Esto último puede corresponderse con la profunda brecha salarial que se mantiene en este país, donde ellas ganan alrededor de 23 por ciento menos que los hombres por igual trabajo.
En sus palabras durante el acto central por el Primero de Mayo en esta capital, la secretaria general de la Central Unitaria de Trabajadores, Bárbara Figueroa, advirtió que las mujeres son una fuerza esencial para el crecimiento de la economía del país y llamó a abrir verdaderamente para ellas las posibilidades laborales.
Recordó que según estudios serios sobre el tema, si 900 mil mujeres se incorporaran al trabajo remunerado, el producto interno bruto del país podría aumentar por lo menos en dos puntos porcentuales anualmente.
Santiago de Chile, 4 de mayo 2019
Crónica Digital /PL