En las campañas de vacunación contra la influenza de 2013 a 2019 más de 70 mil niños chilenos no recibieron la dosis porque sus padres lo impidieron, indican hoy cifras del Ministerio de Salud (Minsa).
Dentro de ese periodo, el año 2017 fue el que se apreció mayor rechazo con 19 mil 588 casos, mientras que en la actual campaña casi siete mil pequeños no han recibido la vacuna porque sus padres así lo decidieron.
Asimismo en 2018 ocurrió otro tanto pues seis mil 688 menores no recibieron el tratamiento pese a estar dentro del grupo de riesgo, pero según las autoridades hay una tendencia a la baja que se debería al mayor acceso a la información por las familias, señala el rotativo.
La campaña antivacunas que acogen muchos padres se debe a mitos por prejuicios respecto a los supuestos efectos secundarios de esos productos.
Según especialistas muchas personas piensan que se van a enfermar con la vacuna, pues esta puede generar algunos síntomas, como fiebre baja o decaimiento, pero eso no significa que les dé influenza, porque no tiene la capacidad de producirla, advierten.
El movimiento antivacunas que ha cobrado fuerza en varios países plantea además criterios sin base científica alguna sobre supuestos efectos secundarios, como que la inoculación provoca autismo.
De acuerdo con El Mercurio, hace unos meses la Corte de Apelaciones de la norteña ciudad de Arica sentó un precedente tras acoger un recurso de protección interpuesto por la Municipalidad contra de una madre que impidió se suministrara la vacuna en dos ocasiones a su hijo menor de un año.
Dicho tribunal ordenó que fuera inoculado incluso con el uso de la fuerza pública si fuese necesario.
En la actual emporada invernal ya se han reportado 24 fallecidos por influenza en Chile, y según las autoridades del Minsa la campaña de inoculación alcanza casi el 85 por ciento del total de población de riesgo, aunque ha habido dificultades con la distribución del medicamento.
Santiago, 17 de junio 2019
Crónica Digital / Prensa Latina.