El precios de numerosos alimentos en Chile podría aumentar como resultado de la fuerte sequía que afecta al país y que ya obligó a decretar emergencia agrícola en cuatro regiones.
El académico de la Universidad de Chile y especialista en comercialización agroalimentaria Luis Sáez, alertó sobre esa situación y contradijo así lo expresado por el ministro de Agricultura, Antonio Walker, quien descartó una subida en los precios de los productos del campo.
Al referirse a las consecuencias de la crisis hídrica que enfrenta una gran parte del país, el titular señaló que «no debiéramos tener alteración de precios porque no hemos tenido heladas».
Sin embargo, el académico Luis Suárez señaló que «lo más probable es que sí haya un alza de precios», porque -a su juicio- aquellos productores que no fueron afectados mayormente por la sequía intentarán cobrar más caro, aduciendo una escasez de oferta de estos productos.
Explicó que «cuando una persona vaya a comprar una lechuga y vea que está más cara, la explicación que se le dará es que hubo sequía, por ello es muy probable que ocurra algún nivel de especulación, puntualizó.
Asimismo consideró que el ministro trata de calmar a la ciudadanía, «pero eso no es suficiente, pues vivimos en un sistema de economía de mercado donde sus señales se usan y de las cuales, a veces, se abusa».
El especialista argumentó que la emergencia agrícola decretada por el gobierno en las últimas semanas se podía haber anticipado, pues aunque los pronósticos climáticos no revelan cuántos milímetros de agua caerán en un año, si señalan si este será más seco o más frío.
Tener en cuenta ese factor habría permitido adoptar medidas preventivas impulsadas tanto desde la política pública como a nivel individual, explicó.
Agregó que el término emergencia hace mención a una situación inesperada, pero las emergencias están siendo cada vez más normales por la sequía y ahora es una medida paliativa que llega un poco tarde porque los animales vienen sufriendo por la falta de forraje desde hace meses.
Suárez señaló entre las acciones que podrían haber ayudado a contener la emergencia, la instalación de tranques de acumulación de agua, construcción de más pozos para regar y generar tipos de cultivos más resistentes.
Ahora se decretó la emergencia lo cual significa que en un mes llegarán los forrajes de los animales. El daño ya está hecho y solo queda hacer una reparación de las pérdidas, expresó.
En las últimas semanas el gobierno decretó emergencia agrícola en las regiones de Valparaíso, Coquimbo y OHiggins, y en más de una decena de comunas de la Metropolítana que tienen áreas rurales, aunque estos no son los únicos territorios que sufre una sequía es considerada como la más fuerte en 60 años.
Santiago de Chile, 23 de agosto 2019
Crónica Digital /PL