Por Marcel Garcés
Dos canciones, “El Derecho de vivir en Paz”, del cantautor Víctor Jara, asesinado por la dictadura de Pinochet, en septiembre de 1973, y” El Baile de los que sobran”, del contestario conjunto de rock, de los años 80, “Los Prisioneros”, se convirtieron en himnos durante la Protesta Nacional de los chilenos que mantuvieron en jaque al gobierno del presidrnte Sebastián Piñera, desde el viernes 18 al domingo 27 del caldeado mes de octubre en el Chile de 2019.
.Ambos temas coreados por los centenares de miles de personas que marcharon por las calles de Santiago y todo el país, e interpretados en los escenarios de los “cacerolazos culturales” , acompañaron con sus versos que reflejaban los reclamos populares de hoy, el reclamo de los manifestantes que exigían justicia, equidad y el fin del modelo económico y político neo liberal representado por Piñera.
.“El Derecho de vivir en paz”, una de las canciones cumbres de Víctor Jara, en homenaje a la lucha del pueblo vietnamita y su histórico conductor, Ho Chi Min, se escuchó durante las marchas, como telón de fondo, la banda sonora, reviviendo en la memoria colectiva y en la emoción popular, como expresión colectiva y multitudinaria del pueblo en la calle, de lucha a la represión, una página histórica de la confrontación social.
Fue parte de la fiesta de la lucha por las demandas y de lucha contra la represión, en la calle , en las barricadas y a todo volumen desde los balcones y ventanales abiertos de los departamentos de los edificios en barrios acomodados del Gran Santiago.
Su texto, pleno de poesía de solidaridad y admiración por un pueblo en lucha directa contra el Imperio, adquiría especial simbolismo, en unas luchas sociales y un país declarado “en guerra”por su presidente, con un Estado de Emergencia implantada por la fuerza militar y en respuesta a la protesta nacional¨
“El derecho de vivir, poeta Ho Chi Min
que golpea de Vietnam a toda la humanidad
ningún cañòn borrara el surco de tu arrozal
el derecho de vivir en paz
indochina es el lugar más allà del ancho mar
donde revientan la flor con genocidio y napalm
la luna es una explosión que funde todo el clamor
el derecho de vivir en paz
Y yo con nuestra canción, que es fuego de puro amor
es palomo palomar, olivo del olivar
es el canto universal, cadena que hará triunfar
el derecho de vivir en paz
la, la, la……
es el canto universal, cadena que hará triunfar
el derecho de vivir en paz
En esta semana crucial de Chile, el tema fue versionado por músicos chilenos que residen en el extranjero, quienes, en palabras del promotor de la iniciativa, Daygoro Serón , participaron , “con la única intensión de sumar nuestros instrumentos a aquellas demandas que la gente de Chile reclama”.
Y en Chile, este domingo 27 se dio a conocer del tema en el masivo acto de protesta cultural en el Parque O’Higgins de Santiago.
La producción fue realizada en conjunto con la viuda del cantautor, Joan Jara y la Fundación Víctor Jara, y participaron los artistas mas populares de la música popular chilena como “Francisca Valenzuela, Gepe, Cami, Camila Moreno, La Moral Distraída, Fernando Milagros, Mon Laferte, Denisse Malebrán, Benjamín Walker, Pedropiedra, C-Funk y Kanela (Noche de Brujas), Pollo (Santaferia), Lalo Ibeas (Chancho en Piedra), Augusto Schuster, Consuelo Schuster, Gianluca, Princesa Alba, Tommy Boysen, Joe Vasconcellos, Roberto Márquez (Illapu), Nano Stern, Javiera Parra, Eli Morris, Fran Straube (Rubio), Mariel Mariel, Paz Court y Manuel García.
Los artistas señalaron que “los músicos y músicas presentes en esta colaboración, además de un importante número de colegas en todo Chile, nos sumamos a esta iniciativa – en conjunto con Joan Jara y la Fundación Victor Jara – de realizar una versión de “El Derecho de vivir en Paz”
““l Baile de los que sobran”, con sus letras de `protesta contra la miseria, la falta de oportunidad bajo la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) es una pieza que reflejó la situación de las generaciones de jóvenes que eran excluidas de una vida digna, de la educación y del trabajo, y objeto de la represión de las fuerzas militares armadas hasta los dientes, la violencia, la tortura y de la muerte desatada bajo la dictadura cívico militar, de Pinochet.
El texto es dramático, amargo, reflejo de un momento sin esperanzas, sin perspectiva, y los versos reflejan ese malestar de entonces bajo la dictadura, que según el autor del, texto, Jorge González, persiste en el Chile del siglo 21. La presencia de tanquetas y blindados artillados, de helicópteros de asalto, en el presente fue un recuerdo demasiado doloroso del pasado.
Estos son los versos de González, coreados también por esa masa enorme , desde las calles y plazas de Chile..:
“ Únanse al baile, de los que sobran/ Nadie nos va a echar de más/ Nadie nos quiso ayudarl
“Nos dijeron cuando chicos/ Jueguen a estudiar/ Los hombres son hermanos y juntos deben trabajar/ Oías los consejos/ Los ojos en el profesor/ Había tanto sol/ Sobre las cabezas /Y no fue verdad, porque esos juegos al final/ terminaron para otros con laureles y futuro/ y dejaron a mis amigos pateando piedras.
“Hey/ Conozco unos cuentos/ sobre el futuro/ Hey/ el tiempo en que los aprendí/ fue mas seguro /mis amigos pateando piedras.
“Bajo los zapatos/ barro mas cemento/ El futuro no es ninguno/ De los prometidos en los 12 juegos/ A otros le enseñaron/ Secretos que a ti no/ A otros dieron de verdad esa cosa llamada educación/ Ellos pedían esfuerzo ellos pedían dedicación/ Y para qué/ Para terminar bailando y pateando piedras”.
El tema se convirtió también en himno de la protesta, representando un mundo sin horizonte ni perspectiva para los jóvenes que viven en las poblaciones populares, y también de los sectores medios del país, que no tienen el país de oportunidades que proclaman desde la publicidad y los discursos de los propagandistas de los llamados sectores “emergentes”, o “aspiracionales”.
Es el aporte del mensaje de la canción y la lucha contra la dictadura de Augusto Pinochet, revivida en tiempos también de lucha, de protesta y esperanza de hoy, a través de la canción, de la música. Un reencuentro también del presente y un futuro en construcción colectiva, con un pasado épico , de una continuidad más que un ejercicio de nostalgia..
Canciones que alimentaron esta expresión de alegría de una juventud dispuesta a construir su futuro, junto a la emoción imposible de ocultar que viene del recuerdo de generaciones que reviven las páginas de su historia, quizás con lagrimas en los ojos, pero con pasión en las voces, con el sentimiento a tope.
Los chilenos recordaron su historia y a sus héroes, junto al reclamo del presente, Como ayer junto a la poesía y el canto.
Santiago de Chile, 3de noviembre 2019
Crónica Digital