Blumel admitió que se avanzó bastante en el control del fuego pero no está controlado, y señaló como positivo que no se han reportado víctimas humanas a pesar de la magnitud del siniestro.
Según las autoridades, el siniestro comenzó en una zona de pastizales y árboles en el cerro Rocault, y avanzó rápidamente hacia una zona habitada donde la mayoría de las viviendas eran de madera, por lo cual se decidió la evacuación de las familias en toda la zona.
El titular señaló que la fiscalía y la Policía de Investigaciones investigan las causas del incendio para poder determinar los posibles responsables, pues todo indica que tuvo un carácter intencional.
Añadió que de ser así se exigirán las máximas sanciones a los autores porque se trata de un delito gravísimo, y llamó a la población a ‘denunciar cualquier conducta sospechosa’ para dar con presuntos responsables.
La Municipalidad y la Intendencia de Santiago dispusieron de dos albergues con capacidad para unas 400 personas para acoger a los damnificados.
Este miércoles, desde muy temprano, los vecinos de las barriadas afectadas se enfrascaron en la triste tarea de remoción de escombros aún humeantes, para tratar de recuperar algunas pertenencias e intentar levantar nuevas viviendas.
En muchos casos esas propiedades destruidas eran todo lo que poseían las familias, la mayoría de escasos recursos, que durante muchos años de trabajo lograron erigir sus casas en los cerros de la parte alta de Valparaíso.
Las autoridades informaron que de inmediato se desplegará un equipo técnico de apoyo a la reconstrucción, con la participación del municipio de Valparaíso, los ministerios de Vivienda, Desarrollo Social, Bienes Nacionales y el Gobierno Regional.
Valparaíso, 26 de diciembre 2019
Crónica Digital/PL