La frase del movimiento feminista en Chile «No sin nosotras» se hizo realidad anoche al ser aprobada por el Congreso Nacional la paridad de género en el proceso para una nueva Constitución en el país sudamericano.
Tras largos debates en los últimos meses, La Cámara de diputados, primero, y finalmente el Senado, aprobaron por mayoría la paridad de género.
En medio de una ovación, el Senado aprobó la norma por 27 votos a favor, siete en contra y cuatro abstenciones.
Previamente, por 98 votos a favor, tres en contra y 52 abstenciones de diputados de derecha, la cámara baja aprobó la propuesta, despechada la víspera en una comisión mixta, destinada a garantizar que exista igual cantidad de hombres y mujeres entre los integrantes de la convención constituyente como mecanismo para redactar la nueva carta magna.
Según lo previsto en la iniciativa aprobada y que fue presentada por las fuerzas de oposición con el respaldo de la mayoría de las diputadas de derecha, las mujeres encabezarán todas las listas para posteriormente intercalar con hombres y cerrar nuevamente con el sexo femenino.
En el debate en el Senado, seguidos desde las gradas por aplausos y consignas, varios legisladores, como el independiente Alejandro Guillier, advirtieron que a este importante paso se llega gracias a la participación protagónica de las mujeres dentro del vasto movimiento de protestas que ha estremecido a Chile desde el 18 de octubre de 2019.
Guillier puntualizó además que tomar una decisión de esa naturaleza será una contribución inestimable del mundo político a la superación de la profunda crisis social y política que vive Chile y le conferirá a las instituciones parte de la confianza y la credibilidad que han perdido ante la mayoría de la ciudadanía.
Por su parte, el senador Guido Girardi, del Partido por la Democracia, señaló que esto no es el resultado de una lucha entre la izquierda y la derecha sino una necesidad de toda la sociedad para construir un Chile mejor para todos.
El senador José Manuel Ossandón, del partido Renovación Nacional, llamó a sus correligionarios de la derecha a no temer a los cambios, que resultan necesarios para avanzar, y consideró que aprobar la paridad de género no es otra cosa que saldar la deuda histórica de la sociedad chilena con las mujeres.
Calificado por muchos como un día histórico, por la discriminación de que han sido víctimas las chilenas secularmente, la aprobación de la paridad de género marca un giro radical en un país donde las mujeres padecen marcadas desigualdades, no solo por ser víctimas de violencia física, sino también discriminadas en todas las esferas de la vida.
Esto se manifiesta en que los salarios y jubilaciones que reciben son mucho menores que los de los hombres, e incluso en que deben pagar más por los seguros de salud y hasta cuando solicitan créditos bancarios.
La aprobación llega además en una semana en la cual las mujeres protagonizan gran parte de las manifestaciones populares, que culminarán con grandes marchas el 8 de marzo y una huelga general feminista el día 9, convocadas por un amplio abanico de organizaciones representativas de ese sector social.
Santiago de Chile, 5 de marzo 2020
Crónica Digital /PL