‘Recibí a Nacho Levy de La Garganta Poderosa para que me cuente sobre la situación de los barrios populares porteños ante el avance de la pandemia. A todos nos ha dolido la muerte de Ramona Medina. Debemos trabajar juntos para mitigar los problemas de los sectores sociales vulnerables’, apuntó en un mensaje el mandatario.
Días atrás Medina, que vivía en la Villa 31, una de las zonas más pobres, había señalado que en el lugar llevan 12 días sin agua y sus habitantes -más de 45 mil- estaba expuestos al nuevo coronavirus SARS-CoV-2.
La vocera de la Garganta Poderosa, quien era insulinodependiente, vivía en un pequeño espacio de tres por tres metros junto a siete familiares, entre ellos su hija discapacitada de 12 años, y había denunciado la precaria situación del barrio, donde los contagios en pocos días han escalado.
Medina, quien además era la coordinadora de Salud de la Casa de la Mujer en el Barrio 31, se le vio en las últimas semanas en varios programas de televisión pidiendo por el restablecimiento del servicio de agua potable en la zona, donde viven amontonadas y en malas condiciones personas de bajos recursos.
Buenos Aires, 19 de mayo 2020
Crónica Digital/PL