La cartera que administra el patrimonio fiscal de todo el país mantiene un protocolo de colaboración suscrito con el Instituto Antártico Chileno desde el 2023 para fortalecer y facilitar la instalación de nuevos laboratorios y ampliar infraestructura en las dos bases existentes. Los funcionarios de la Secretaría de Bienes Nacionales, Geomensor Iván Sasso, a cargo de la Unidad de Catastro, el geógrafo Roland Larenas, analista de la misma unidad y el Fiscalizador Sergio Vargas de la Unidad de Bienes, volaron cerca de dos horas hasta el continente antártico para llegar hasta la Base Frei y trasladarse cerca de un kilómetro a la Base Escudero en la isla Rey Jorge. Para Iván Sasso, esta es su tercera visita a Antártica, cumpliendo labores de mensura y planimetría para habilitar nuevos servicios para la investigación, la conservación y el turismo. “Vine en 2008 en el emblemático buque Gobernador Viel y en 2018 en un Hércules. Me impresiona como ha cambiado el clima en tan poco tiempo y se hace notorio que, a determinadas horas del día, con una temperatura ambiente de un grado, escasa nieve y tres capas de ropa, se siente un efecto de calor que inquietó a nuestro equipo de trabajo”. Señala que existen cuatro destinaciones otorgadas por Bienes Nacionales y vigentes para Inach. La primera tiene emplazada a la Base Profesor Julio Escudero, el Laboratorio Antártico de Radiación Cósmica (LARC) y la Estación Ionosférica con una superficie de 34,64 hectáreas, la siguiente abarca 550 metros cuadrados y está al interior de la Villa Las Estrellas, luego están dos lotes que suman 133 hectáreas y una última destinación alcanza las 119 hectáreas con la isla Ardley y su Sitio de Interés Científico y Base Julio Ripamonti. Destacó que el decreto N° 798 emitido por la cartera en diciembre de 2013 señala que estas destinaciones a Inach deberán dar presencia a Chile en el Territorio Antártico, adecuar la actividad científica nacional y extranjera, administrar áreas protegidas según el Sistema del Tratado Antártico y colaborar con el logro de objetivos de la Política Antártica Nacional incluyendo el apoyo al turismo controlado. Así pueden llevarse adelante acciones tales como el Programa Científico Antártico, la Expedición Científica Antártica y la adecuada mantención y operación de las bases científicas. Bienes Nacionales realizó en 2008 la mensura necesaria para la reapertura de la Base Arturo Prat. En esa ocasión también generó un punto geodésico en un sector alto de los terrenos administrados por la Fuerza Aérea. “Esto nos permitió, dice Sasso, realizar ahora una mensura muy precisa de la Base Escudero de Inach”. Para el Seremi de Bienes Nacionales, Sergio Reyes, “la estadía de estos tres funcionarios resulta ser muy relevante. No sólo para la ciencia antártica, sino también para la economía. Además, hay una visión compartida en el territorio, que bajo una lógica de sustentabilidad como la que procura la administración de nuestro gobierno, permite la convivencia de actores muy diversos”. “Por un lado, ejerciendo la soberanía antártica del Estado de Chile, a través de Inach […]
antartida
La Antártida es conocida como el Continente Blanco, el sitio más austral del mundo y ubicado casi enteramente en el Círculo Polar Artico, bajo la mirada de más de 50 países, entre ellos Chile. Para dejar establecida cierta soberanía sobre parte de los 14 millones de kilómetros cuadrados del continente, este país sudamericano nombra a su XII Región como Magallanes y la Antártica chilena. En los próximos días, una expedición de científicos y periodistas visitaremos entre otros lugares, la Reserva de la Biosfera de Cabo de Hornos (RBCH), un área protegida de Chile, declarada así por la Unesco. Unica en el mundo y concebida de esta forma por el programa el Hombre y la Biosfera de la Unesco, promueve el desarrollo sostenible a nivel ecológico. Uno de los puntos estratégicos para el estudio del cambio climático. De acuerdo con los especialistas, la Antártida es mucho más que el cuarto continente más grande después de Asia, América y Africa, por ese orden. Lo que allí ocurra, determinará el clima de otras partes muy alejadas de estos remotos parajes, que fueron los últimos en ser descubiertos o colonizados por los humanos en 1820, subrayan con firmeza los científicos. Visitar la RBCH permitirá conocer una de las 24 ecorregiones más prístinas del planeta. Abarca 4.9 millones de hectáreas, de las cuales tres son acuáticas y 1.9 terrestres. Estaremos en el entorno del Parque etnobotánico Omora, al norte de la isla Navarino y en la ribera sur del Canal de Beagle, que debe su nombre al buque HMS Beagle, que realizó estudios hidrográficos de Sudamérica de 1826 a 1830. Famoso también, porque fue en el HMS Beagle donde el naturalista inglés Charles Darwin tuvo su primer encuentro con un glaciar el 29 de enero de 1833. Por Fausto Triana Santiago de Chile, 18 de abril 2017 Crónica Digital /PL