Un iceberg de 350 kilómetros cuadrados se separó del glaciar en 2015, pero no fue hasta que los investigadores de la Universidad Estatal de Ohio probaron un nuevo software de procesamiento de imágenes cuando se notó algo extraño en las capturas de satélite tomadas antes del evento.
En las mismas vieron evidencia de que una grieta se formó en la base de la plataforma de hielo cerca de 35 kilómetros tierra adentro en 2013.
La hendidura se propagó durante dos años, hasta que apareció a través de la superficie del hielo y puso el iceberg a la deriva en un proceso de 12 días entre finales de julio y principios de agosto de 2015.
Washington, 28 noviembre 2016
Crónica Digital / PL