El sorpresivo deceso de un alumno del Liceo José Francisco Vergara de Viña del Mar en su clase de Educación Física volvió a encender las alarmas. El médico Rienzi Díaz advierte que es necesario adoptar medidas preventivas. “Muchas veces los jóvenes creen que por su edad están menos expuestos a sufrir un problema cordiaco o un infarto, pero eso no es así. La recomendación es que se hagan un chequeo”. Profundo impacto causó en las últimas horas la noticia de la muerte de un joven de 17 años, alumno de tercero medio del Liceo José Francisco Vergara de Viña del Mar, quien sufrió un sorpresivo paro cardiorrespiratorio mientras estaba en su clase de Educación Física al interior de ese establecimiento. Sin embargo, este lamentable episodio no representa una novedad, ya que en noviembre del año pasado una estudiante de la misma edad murió al interior de un gimnasio de la comuna de Villa Alemana, mientras practicaba una exigente rutina de ejercicios. Estos decesos se suman a otros de similares características ocurridos en el último tiempo en Chile y, también, en otros países, los cuales han afectado tanto a jóvenes desconocidos como a connotados deportistas de alto nivel. En opinión del médico cardiólogo y director del Laboratorio Experimental de Cardiología de la Escuela de Medicina de la Universidad de Valparaíso, Rienzi Díaz, detrás de este tipo de situaciones suelen existir ciertas patologías del corazón difíciles de detectar y que son la primera causa de muerte súbita en gente de entre 15 y 40 años, aparentemente sana, que hace ejercicio e incluso en atletas consumados. Se trata de la miocardiopatía hipertrófica, la displasia arritmogénica y la enfermedad congénita de las arterias coronarias. “La miocardiopatía hipertrófica está asociada a un cierto patrón genético y puede no dar síntomas. A su vez, la displasia arritmogénica del ventrículo derecho se caracteriza por generar arritmias ventriculares complejas, mientras que la enfermedad congénita de las arterias coronarias afecta a personas que nacen con una arteria anómala o que tiene un trayecto anómalo y que cuando la persona hace ejercicio en forma extrema el flujo coronario se puede alterar y, como resultado de ello, el paciente desarrolla una isquemia que deriva en una arritmia ventricular. Todas ellas conforman la primera causa de muerte súbita. Los ciclistas y los futbolistas son los más afectados por ellas”, precisa el director del Laboratorio Experimental de Cardiología de la Escuela de Medicina de la Universidad de Valparaíso. El especialista explica que a lo anterior se deben añadir algunos factores de riesgo que elevan la posibilidad de que una persona joven sufra un paro cardiorrespiratorio mientras practica ejercicios, entre los cuales destaca a la hipertensión arterial, la diabetes, la obesidad, el tabaquismo y el colesterol alto. “Las personas que padecen alguna de estas condiciones son más propensas a sufrir problemas cardiacos si practican ejercicio por primera vez o deciden retomar la actividad física después de mucho tiempo. Quien esté afectado por alguna de ellas debe tomar en cuenta esto y hacerse una evaluación […]