Miles de santiaguinos colmaron en la víspera el céntrico Paseo Bulnes de esta capital, para disfrutar del concierto «Por el derecho a vivir en paz», promovido por un amplio abanico de organizaciones sociales, sindicales, juveniles y políticas.
Unas 30 mil personas, según los organizadores, abarrotaron a lo largo de varias cuadras el Paseo, muchas de ellas portando banderas y pancartas con consignas a favor de la paz y la soberanía de los pueblos del continente y exigiendo el respeto a la autodeterminación de Venezuela y contra la injerencia extranjera en esa nación.
El evento contó con la presencia de numerosas personalidades, entre ellas el presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, y varios senadores y diputados de oposición.
Desde las 15:00, hora local, hasta entrada la noche, pasaron por el escenario grupos de vasta trayectoria artística en este país, como Inti Illimani, Illapu, Sol y Lluvia, Moral Distraída, Villa Cariño, Banda Conmoción, Folckband, Ankatu Alquinta, Legua York y los cantantes Evelyn Cornejo, Tomo como Rey, Francisco Villa, Juan Ayala y Héctor Pavéz, entre otros.
Entre los promotores del concierto figuraron las Juventudes Comunistas, la Central Unitaria de Trabajadores, la Coordinadora Nacional de Migrantes, el Sindicato de Trabajadores y Artistas de la Danza, la Confederación de Trabajadores del Cobre y organizaciones femeninas.
También, Juventud Progresista, Movimiento Autonomista, Comunes, Izquierda Libertaria, Nueva Democracia, SOL, Juventud Rebelde Miguel Enríquez, Igualdad, MAS Izquierda Ciudadana, Juventud Socialista y Partido Humanista.
Al cierre de la presentación fue leída una declaración de seis puntos firmada por los artistas participantes y las organizaciones convocantes en la cual rechazan cualquier muestra de intolerancia y discriminación y expresan la decisión de «luchar contra el nuevo fascismo que emerge y amenaza los derechos humanos, así como la convivencia pacífica y justa de los pueblos de América Latina y el Caribe».
El texto recalca la defensa al derecho de los pueblos a solucionar pacíficamente sus conflictos sin intervención extranjera y condena al gobierno de Donald Trump y sus aliados sobre Venezuela, que establecen sanciones económicas y castigan al pueblo venezolano, mientras sostienen a un «presidente encargado» que llama al golpe de estado y a la intervención militar extranjera en su propio país.
Dichos actos, amparados en una agresiva campaña y cerco mediático, profundizan el problema y atentan decididamente contra la posibilidad de una superación pacífica de una crisis que debe resolver los venezolanos, puntualiza.
Igualmente se solidariza con el pueblo de Colombia el cual, desde la firma del acuerdo de paz, ya contabiliza cerca de 500 dirigentes sociales asesinados, y a lo cual se suma el intento por provocar un enfrentamiento militar en la frontera con Venezuela hace algunas semanas.
Asimismo rechaza la visita a Chile de presidentes responsables de empujar a nuestro continente al borde de un conflicto militar con consecuencias humanas incalculables y advierte que mandatarios como Ivan Duque, Mauricio Macri y Jair Bolsonaro, «no tienen autoridad en materia de derechos humanos y no fueron ni serán bienvenidos en Chile«.
Santiago de Chile, 25 de marzo 2019
Crónica Digital /PL