La selección masculina de Venezuela enfrentará hoy en el Domo Bolivariano de la ciudad de Barquisimeto, estado de Lara, a su similar de Chile en la segunda doble jornada de la justa clasificatoria al Campeonato Mundial de baloncesto China-2019.
El director técnico de la escuadra venezolana, Fernando Duró, aseguró que el equipo entrenó intensamente durante cuatro días de concentración de cara al partido contra el seleccionado chileno.
Significó el estratega que para el encuentro de este jueves contra Chile, y el desafío del próximo 25 de febrero ante el elenco de Colombia en la ciudad de Medellín, el combinado de Venezuela incorporó a siete jugadores jóvenes, entre los que destacan José Ascanio, Yoanner Sifontes y José Bracho.
La selección venezolana marcha en el segundo escaño del grupo B en la justa clasificatoria de las Américas al Mundial de baloncesto China 2019, producto de una victoria y una derrota.
En la primera doble jornada del certamen, Venezuela venció 85-71 a Colombia en Barquisimeto el 24 de noviembre de 2017, y tres días después sucumbió 72-60 frente a Brasil.
Antes de disponer de si similar venezolano, el elenco brasileño superó 86-73 a Chile y comanda el apartado con saldo perfecto de dos triunfos sin derrotas.
La lid clasificatoria de las Américas consta de otros tres grupos, con Argentina, Uruguay, Panamá y Paraguay como integrantes del A; en el C pugnan Estados Unidos, Puerto Rico , México y Cuba; mientras en el D compiten República Dominicana, Canadá, Islas Vírgenes Estadounidenses y Bahamas.
Caracas, 22 de febrero 2018
Crónica Digital /PL
Jue Feb 22 , 2018
El próximo 24 de marzo del 2018, las organizaciones de pobladoras y pobladores de distintos lugares del país, en conjunto con otras organizaciones de la sociedad civil, convocamos en cada una de las ciudades a la IV marcha nacional por el derecho a la vivienda y la ciudad. Vemos con preocupación la existencia de mecanismos e injusticias que imposibilitan el reconocimiento del derecho a la ciudad y a una vivienda digna en nuestra sociedad. La desregulación del mercado del suelo, que da pie a la especulación inmobiliaria, desintegra y degrada la ciudad, expulsando en consecuencia a las y los más pobres a las periferias, lejos de sus lugares de trabajo y sin posibilidad de acceder a servicios públicos, degradando por tanto su calidad de vida. Por otra parte, vemos como hoy en Chile existen 146 mil familias que tienen que gastar la mitad de sus ingresos en pagar arriendos abusivos, por la falta de políticas asociadas a su regulación, lo que además de ser en sí mismo escandaloso, muchas veces deriva en que algunas personas no tengan otra opción que tomarse un terreno, viviendo sin servicios básicos, con problemas de contaminación, seguridad y una precaria materialidad en sus nuevos hogares. Y en el mismo sentido, con dolor vemos que familias completas de migrantes, que llegan al país en búsqueda de una mejor calidad de vida, son tratados por el aparataje estatal como una amenaza, desalojándolos de viviendas, discriminándolos por su color de piel, en la micro y en el diario vivir. Nos hemos acostumbrado a vivir entre “iguales”, segregados, sin ver la riqueza del compartir en sociedad, en el trabajo, el barrio y la escuela. Ante esto, diversas organizaciones de pobladoras y pobladores, y de vivienda social, nos hemos reunido, a partir de un diagnóstico compartido, para coordinar nuestros esfuerzos en este sentido. Hacemos un llamado a trabajar colectivamente por conquistar el derecho a la vivienda digna y a consolidar una ciudad inclusiva, solidaria y comunitaria, definida entre todos y todas. Estamos convencidos de que quienes poblamos los espacios somos los que generamos la riqueza y los que construimos y transformamos las ciudades, y no permitiremos que algo tan básico como un techo, ese mismo que construimos día a día, se nos niegue. Y no se trata sólo de una vivienda aislada: se trata de su emplazamiento, su entorno, su conectividad, su acceso, su sentido, su comunidad, su barrio asociado. Su ciudad. Para avanzar en esta causa reconocemos que tanto el Estado, como la empresa y la sociedad civil tienen un rol clave en la construcción y consolidación de ciudades justas y sostenibles. El logro de esto depende de que generemos espacios de encuentro y podamos tomar medidas conjuntas con miras a una ciudad de todos. Es fundamental potenciar la función social del suelo y de la propiedad. Estamos convencidos que la propiedad por sí misma no otorga dignidad, sino que es el desenvolvimiento en un entorno integrado, sostenible y con una vivienda adecuada, el que dignifica a la persona […]