Mar May 31 , 2016
La polarización en torno a la segunda vuelta electoral del próximo domingo, por la presidencia de Perú, atraviesa hoy a diversas fuerzas políticas, ante el dilema de definirse por Keiko Fujimori o por Pedro Pablo Kuczynski. Los debates internos han llegado a aflorar en públicas contradicciones entre los que prefieren a la hija del expresidente preso, Alberto Fujimori, los que optan por su rival, empresario y político, y los que plantean que los partidos que están fuera de la competencia deben dejar a sus electores en libertad para decidir. En el caso de las fuerzas progresistas, la dirigente más destacada, Verónika Mendoza, pidió ayer a la ciudadanía votar por Kuczynski, pero solo para evitar que gobierne Fujimori, por considerar que constituye un peligro para la democracia y la paz, por presuntos vínculos de su partido con el narcotráfico. Sin embargo, sectores minoritarios de izquierda mantienen la posición de votar en blanco o viciar el sufragio, como expresión de rechazo a la postura neoliberal de los dos candidatos finalistas, factor que ha señalado también Mendoza y que ha demorado su decisión hasta ayer, a menos de una semana de la crucial elección. En la derecha, la dirigente del Partido Popular Cristiano (PPC), Lourdes Flores, anunció que votará por Kuczynski, por considerarlo más experimentado y apto para gobernar que Fujimori, y reconoció que en su partido hay quienes sufragarán por la candidata. El partido centrista Acción Popular (AP), respaldó a Kuczynski y contradijo así a quien fuera su candidato presidencial en la primera vuelta, Alfredo Barnechea, quien planteaba no votar por ninguno de los dos postulantes, por discrepancias con ambos. El presidente de AP, Mesías Guevara, consideró posible una sanción al parlamentario de su partido Víctor García Belaúnde porque este cuestionó públicamente la determinación partidaria y atacó en comentarios por televisión a Kuczynski, según dijo. García Belaúnde rechazó la posibilidad de ser sancionado y aseguró que no votará por Fujimori, pero acotó que nadie puede ser obligado a votar por determinado candidato y alegó que no respalda a Kuczynski por ataques de este a Barnechea en la primera vuelta, disputada el 10 de abril. Mesías señaló por su parte que «es urgente y necesario que las fuerzas políticas democráticas, como Acción Popular, tomen partido y no una posición tibia». El viejo Partido Aprista, no ha optado hasta hoy por ninguno de los candidatos y su líder, el expresidente neoliberal Alan García, guarda silencio, tras renunciar al cargo de titular del partido por su fracaso en la primera vuelta electoral de abril pasado. Los dirigentes y figuras apristas se inclinan por uno u otro, aunque el legislador Mauricio Muller afirmó que la mayoría de los militantes votarán por Kuczynski. La Juventud Aprista emitió un comunicado de apoyo al citado candidato. «Nuestro deber cívico al sufragar libremente coincidirá con las fuerzas democráticas que se oponen a que la hija de la dictadura de los años 90 logre llegar a la presidencia», señala el texto. De otro lado, Kuczynski sumó previamente los respaldos de los […]