El canciller de Chile, Heraldo Muñoz, quien tiene previsto reunirse hoy aquí con su par de Ecuador, Ricardo Patiño, consideró indispensable la integración regional, a pesar de los diferentes modelos e ideologías existentes en el subcontinente.
Entendemos que en la región hay modelos e ideologías diferentes, pero eso no debe ser un obstáculo para promover áreas de convergencia y entendimiento, aseguró el jefe de la diplomacia chilena, en entrevista que publica este jueves el diario El Telégrafo.
De acuerdo con Muñoz, aunque bloques como la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), cumplen roles distintos, todos tienen como fin promover la integración regional.
En el caso de la Celac, cuya presidencia pro tempore está a cargo de Ecuador, el funcionario apuntó que la agenda de ese organismo y la del gobierno chileno son complementarias, pues en su centro, dijo, están la inclusión social y la lucha contra la desigualdad.
Mediante la Celac se han establecido espacios de diálogo con socios extrarregionales, como China y la Unión Europea, que permiten avanzar en materias de interés mutuo, agregó.
Muñoz también elogió el trabajo de la Unasur, al destacar que esa instancia, que agrupa a las 12 naciones suramericanas, puede ayudar a promover la búsqueda de espacios de entendimiento y compromisos para que prime el diálogo y se evite la polarización, en situaciones como la que vive Venezuela.
En ese sentido, recordó la misión de cancilleres del bloque subregional que viajó el año pasado a Caracas para facilitar el diálogo entre el gobierno y la oposición venezolanos.
Unasur puede jugar un papel importante y Chile ha tenido siempre el propósito de ayudar a que los conflictos se resuelvan en la arena política, en la arena electoral, y no en la calle, a través de la violencia, sentenció.
Interrogado sobre las relaciones relaciones chileno-ecuatorianas, Muñoz expresó que las mismas están afirmadas sobre una cooperación estrecha que fluye tanto de una antigua comunidad de intereses como de una visión compartida frente a problemas regionales y globales.
En el terreno bilateral, añadió, tenemos líneas de trabajo consolidadas y promisorias en materia de energía, educación, salud, cultura, defensa y el apoyo a las comunidades de inmigrantes que viven en ambos países.
Consideró, no obstante, que aún debe aprovecharse mejor el enorme potencial que existe en el comercio bilateral, el cual, dijo, se ha visto afectado por las salvaguardias arancelarias impuestas por Ecuador para proteger su economía frente a la caída de los precios internacionales del petróleo y la apreciación del dólar.
Sabemos que se trata de dificultades que quedarán atrás; mientras tanto, estamos dialogando intensa y amistosamente con las autoridades ecuatorianas para aminorar el impacto negativo de dichas restricciones al comercio.
Quito, 9 de abril 2015
Crónica Digital / PL