La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, se manifestó hoy indignada por la brutal agresión que recibió una mujer en la sureña ciudad de Coyhaique y recalcó que se trabaja duro para poner fin a la violencia de género.
«En Chile ya no hay espacio para los cobardes que atacan a las mujeres, así que quiero llamar a todos a que nos hagamos cargo como sociedad para que estos casos no vuelvan a suceder», enfatizó Bachelet.
La mandataria se refería así al caso de Nabila Rifo, de 28 años, madre de cuatro hijos de entre 8 y 14 años, agredida al parecer por dos hombres y luego encontrada con lesiones extremadamente graves.
«Estamos trabajando duro, con pasos concretos para ponerle fin a la violencia de género que hoy vuelve a mostrar su peor cara, su cara más deleznable», comentó la jefa de Estado.
El mayor Carlos Rojas, de la Dirección de Investigación Criminal de Carabineros, informó la víspera que Rifo tiene un cuadro alarmante.
«Presenta lesiones tan graves como la fractura de su cráneo, pérdida de masa encefálica, de sus piezas dentales y lo peor de todo es que sus globos oculares no están en su posición original», precisó Rojas.
Bachelet apuntó que además de su rechazo al hecho que «afecta a Nabila y a toda su familia» añadió que «no vamos a tolerar este tipo de ataques».
Del caso no han aflorado nuevas noticias. Ayer en diversas marchas, se dio la condena unánime de la población, junto con autoridades del Gobierno.
De acuerdo con el parte de Carabineros en la madrugada del sábado, vecinos de esa ciudad alertaron a las autoridades de que dos personas habían propinado un brutal ataque a una mujer y posteriormente se dieron a la fuga.
La policía detuvo hoy en Coyhaique a un hombre acusado (Mauricio Ortega) de estas horrendas acciones junto a un amigo, supuestamente ambos partícipes de la brutal golpiza.
«Nuevamente quiero reiterar que no hay nada que justifique este nivel de violencia y crueldad, ni los celos, ni el alcohol, ni las drogas, nada», afirmó visiblemente conmocionada la ministra de la Mujer, Claudia Pascual.
Esto sólo se sustenta en la cultura machista que utiliza y reduce a las mujeres y las siente como si fueran de su propiedad, acotó.
Santiago de Chile, 17 de mayo 2016
Crónica Digital / PL
