Las características del sistema no solo son diferentes a las conocidas hasta el momento para ambientes tropicales, sino que su salud ofrece información sobre cómo los ecosistemas de coral pueden responder a la aceleración del calentamiento global, señalaron los expertos.
Los autores también advirtieron que el desarrollo a escala industrial del Amazonas, con perforaciones para obtener petróleo cerca de los arrecifes, podría presentar un gran desafío para el nuevo arrecife.
Por eso, Greenpeace lanzó una campaña para tratar de impedir que distintas empresas comiencen proyectos de exploración en la boca del Amazonas, hábitat de especies en peligro de extinción como el manatí, la tortuga terecay o la nutria gigante.
Ottawa, 31 enero 2017
Crónica Digital /PL