Según el gobernador de Anzoátegui, el alcalde Marcano aspira a la gobernación del estado, mientras que el diputado opositor Armas quiere ser el alcalde de Urbaneja, y eso provocó -afirmó Moreno- que los dos políticos se enfrentaran, y los guarimberos (delincuentes armados) pagados por el partido Voluntad Popular intentaran tomar la sede policial de Urbaneja.
El alto funcionario venezolano detalló que este enfrentamiento dejó un saldo de cuatro personas heridas, dos de ellos funcionarios de la policía local.
Señaló que, además del ataque a la sede policial, los grupos violentos secuestraron tres camiones, uno de limpieza de calles y dos de una empresa privada.
‘En dos calles -explicó-, en la avenida principal de Urbaneja y en la frontera entre Barcelona y Urbaneja, ahí se concentraron durante 20 días cerca de 60 a 70 encapuchados que paga el alcalde Marcano, con el dinero que le otorgó el presidente Nicolás Maduro para pagarle a los trabajadores’, denunció el gobernador.
Subrayó además que estas acciones violentas se generan por los intereses políticos y de poder del parlamentario y del alcalde en cuestión, sobre quien pesa una decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) en la que se ordena tomar acciones para evitar que se obstaculicen las vías públicas en esa jurisdicción.
Moreno también acusó el alcalde Marcano de contribuir y permitir el levantamiento de alcantarillas, colocación de barricadas y otras acciones violentas contra el gobierno bolivariano.
Primero Justicia y Voluntad Popular son partidos que integran la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), una coalición de la ultraderecha, que lidera las protestas violentas antigubernamentales, las cuales hasta ahora dejaron más de 60 personas muertas, más de mil heridos y multimillonarias pérdidas económicas en Venezuela.
Caracas, 7 de junio 2017
Crónica Digital /PL
