n desconocido lanzó esta medianoche una bomba hacia la embajada de Estados Unidos en Montenegro y después se suicidó haciendo estallar otro artefacto explosivo.
Autoridades policiales en la capital montenegrina informaron esta mañana que el edificio de la sede diplomática no resultó dañado y que se trató de una granada de mano.
No se reportó ninguna víctima además del suicida -que aún no fue identificado- y los daños materiales son escasos, añadió la fuente.
Fuerzas del orden interior bloquearon un tramo de la avenida en el que se ubican la embajada y la Agencia de Seguridad Nacional del país y mantienen acordonada la zona del suceso.
Se conoció que la misión diplomática estadounidense advirtió a sus ciudadanos a evitar circular por el área debido a lo que denominó ‘situación de inseguridad activa’.
Podgorica, 22 febrero 2018
Crónica Digital /PL
Jue Feb 22 , 2018
Aunque permanecen los principales acuerdos firmados hasta el momento, las relaciones entre Cuba y Estados Unidos experimentan un retroceso después de la llegada a la Casa Blanca del presidente Donald Trump. Mucho antes de sus pronunciamientos agresivos contra la nación caribeña en su primer discurso sobre el estado de la Unión el 30 de enero, Trump mostraba las intenciones injerencistas de su gobierno hacia la mayor de las Antillas. Así fue el 16 de junio de 2017, cuando en la Florida rubricó el Memorando Presidencial de Seguridad Nacional sobre el Fortalecimiento de la Política de los Estados Unidos hacia Cuba, y con ello el recrudecimiento de la hostilidad de Washington hacia La Habana. En aquella alocución, Trump ratificó la vigencia del bloqueo económico, comercial y financiero que la nación norteña mantiene contra el país antillano desde hace más de medio siglo, así como su intención de recrudecerlo. Tal política persiste hoy, por ese motivo la subdirectora del Centro de Estudios Hemisféricos y sobre Estados Unidos, Olga Rosa González, consideró que las relaciones con el magnate inmobiliario y su gobierno seguirán siendo complejas. De acuerdo con declaraciones de González a Prensa Latina, tal postura del gobernante republicano se evidenciaba desde que llegó a la Casa Blanca, e incluso antes, y se refirió al discurso agresivo de Trump en torno a la figura del líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro (1926-2016), después de su fallecimiento. Durante el primer año de la administración del presidente 45 se formularon acusaciones falsas contra Cuba con el tema de los alegados ataques sónicos, la retirada de personal de la embajada de Washington en La Habana, y la expulsión de miembros de la misión diplomática de la isla en Estados Unidos. Esto afecta la ejecución de los acuerdos firmados entre los dos países y por consiguiente las relaciones bilaterales, restablecidas en julio de 2015, señaló la académica. En la administración del expresidente Barack Obama (2009-2017), ambos gobiernos rubricaron una veintena de acuerdos en materia de prevención y enfrentamiento de los actos terroristas, contra el tráfico ilícito de estupefacientes, asuntos de ciberseguridad, la trata de personas, el tráfico de emigrantes y la cooperación ante derrames de petróleo en el golfo de México, entre otros. Asimismo, González se refirió a la reciente firma de una orden ejecutiva para mantener abierta la cárcel en la base naval de Guantánamo que Washington mantiene en contra de la voluntad del pueblo y Gobierno de la isla caribeña. El centro de reclusión, abierto en 2002 y que llegó a albergar unos 800 reos -hoy quedan 41-, es señalado por organismos internacionales como un lugar donde se cometieron torturas y sistemáticas violaciones de los derechos humanos contra los prisioneros. La devolución del territorio ilegalmente ocupado es uno de los elementos que exige Cuba para una verdadera normalización de relaciones entre La Habana y Washington, añadió la experta. POLÍTICA DE BLOQUEO INAMOVIBLE El presidente estadounidense John F. Kennedy (1917-1963) oficializó hace 56 años el cerco económico, comercial y financiero, unilateral política que […]